Nuestro país tiene mucho talento de exportación en muchos ámbitos y, definitivamente, esto también incluye la séptima forma de arte: el cine. Por el pasado mes patrio, les comparto mi top 3 mejores películas peruanas que merecen reconocimiento. Aquí va un breve comentario sin spoilers:
3. WIÑAYPACHA
Wiñaypacha (o eternidad en español) es una película dirigida por Óscar Catacora, estrenada el 19 de abril del 2018. Este filme, de género drama, fue grabado totalmente en aimara y estuvo preseleccionado para la premiación de los Oscars en 2019 en la categoría de Mejor Película en Lengua Extranjera junto con películas como Roma y Pájaros de Verano.
Situada en el nevado Allincapac en Puno, la película nos relata la de historia de una pareja de ancianos que vive en una cabaña de adobe junto con su ganado y un perro totalmente alejados del pueblo y sus habitantes. Añoran el regreso de su único hijo quien emigró a la capital y de quien no han sabido desde hace ya un tiempo. Viven en la constante espera y teniendo la única compañía de uno a otro para sobrevivir las dificultades que se encuentran en el camino debido a su avanzada edad. El director se basó en la nostalgia que vivían sus abuelos después de que sus familiares los dejaran para mudarse a Lima. No les cuento más para que puedan disfrutarla.
Actualmente se encuentra disponible en plataformas como Netflix y para rentar en Amazon Prime. Totalmente en aimara y con subtítulos en diversos idiomas.
2. RETABLO
Lanzada nivel nacional en mayo de 2019, “Retablo” es un drama dirigido por Álvaro Delgado-Aparicio que fue escrito y grabado en su totalidad en quechua ayacuchano. Fue financiado por el premio noruego Sørfond, nominado a Mejor Película Internacional en los premios Oscars y en los premios Goya. Además, fue ganadora en la categoría de Mejor Película Peruana en el Festival de Cine de Lima.
Esta película retrata la vida de una familia nuclear en la que, nuestro protagonista, Segundo, quien es el único hijo de la familia, se encuentra aprendiendo el oficio de su padre que consiste en hacer retablos. Refleja una firme relación padre e hijo que poco se va truncando debido a un secreto. Toca temas como la disfunción familiar, la adolescencia temprana, el crecimiento y ser parte de la comunidad LGBTIQA+ en un entorno conservador. Es un contraste entre el mundo andino, lo tradicional y la modernidad. También nos brinda escenas impactantes gracias a la dirección de cámara y fotografía que permitió, por ejemplo, grabar un recorrido de más de 4 minutos sin ni un corte.
Lastimosamente ha sido sacada del catálogo de Netflix, pero se puede rentar en la plataforma de Amazon Prime. Como el anterior largometraje, se encuentra en su idioma original (quechua) con subtítulos en diversos idiomas.
1. WILLAQ PIRQA, el cine de mi pueblo
Fácilmente mi favorita de esta lista, Willaq Pirqa, el cine de mi pueblo fue estrenada el 8 de diciembre de 2022. Es una comedia-drama que mantiene la inocencia que nos transmite ver el mundo desde la perspectiva de la niñez.
La película ganadora de tres premios en el Festival de Cine de Lima fue dirigida por César Galindo, arquitecto licenciado que posteriormente se dedicó a estudiar cine. Este largometraje viene a ser el segundo en su carrera; sin embargo, es el primero que dirigió con los beneficios del Ministerio de Cultura de Perú.
Situada en Maras y Moray, Cusco y grabada plenamente en quechua, desarrolla la relación que tiene el pequeño Sistu, protagonista de esta aventura, con su comunidad, su familia y, el foco de la película, su recientemente encontrado amor por el cine. Es un filme que te transmite una sensación de calidez, al recorrer escenas desde la vista de un niño que poco a poco empieza a conocer que hay más allá de su pueblo y que decide compartir estos descubrimientos con sus vecinos. Es graciosa en ocasiones, enternecedora en otras y triste cuando se necesita. A pesar de su carácter jovial, nos deja escenas que nos llevan a reflexionar, por ejemplo, sobre la emigración a la capital en nuestro país y como afecta a estas comunidades, especialmente a la familia (caso que comparte con Wiñaypacha).
Tuve el privilegio de verla en su semana de estreno el pasado diciembre. La sala de encontraba llena de un público expectante que al final brindó un rotundo aplauso al filme y salió con lágrimas de felicidad en los ojos. Agregaré que esta película peruana-boliviana se encontró catorce semanas en cartelera gracias a demanda del público. Creo que eso basta para convencerlos de darle una oportunidad.
Willaq Pirqa, el cine de mi pueblo no se encuentra disponible en ninguna plataforma de streaming; sin embargo, eventualmente el Centro Cultural de la Pontificia Universidad Católica del Perú la transmite en sus salas. Así que es cuestión de estar atentos a cuando pasen este filme.
Asimismo, recordemos que del 10 al 18 de agosto tomará lugar el Festival de Cine en Lima; así que, esta es una invitación para no perderse de esta actividad. Incentiven futuros talentos y ¡Consuman cine peruano!
Edición: Regina Ramirez