En esta coyuntura, es común escuchar las constantes medidas que se están aplicando para contrarrestar los efectos económicos que nos trae y nos traerá el coronavirus. Los esfuerzos que están haciendo el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) y la Superintendencia de Banca y Seguros, se resumen en un fuerte gasto para no dejar caer la cadena de pagos y reactivar la economía. El BCRP, a lo largo de los años, se ha encargado de preservar la estabilidad monetaria y frente a estos shocks de oferta y demanda, el 9 de abril, decidió bajar la tasa de interés de referencia a 0.25%, la más baja desde el 2002. ¿Qué significa esto? En este artículo, #Freakonomics y #Perú se unen para explicarlo mejor.
Tasas bajas como mecanismo para una reactivación económica.
La tasa de interés de referencia es, por excelencia, una de las herramientas favoritas del BCRP para estimular la economía cuando dicha entidad lo cree necesario ¿Pero qué está detrás de esta herramienta?. Como dice su nombre, sirve de referencia para el sistema financiero. En particular, para los bancos al momento de fijar una tasa activa (para préstamos) y pasiva (para ahorros). Si la tasa de referencia disminuye de 1.25% a 0.25%, empuja a que las tasas de corto plazo de muchos bancos también disminuyan. Lo que hace los préstamos más baratos y los ahorros menos atractivos para los individuos. ¿Cómo esto reactiva la economía?. A medida que las familias tomen más deuda, procederán a gastar o invertir en un negocio. Esto, a su vez, generará mayor demanda de bienes y servicios que se verá traducido en mayor el aumento del empleo, y este en mayores ingresos para los individuos. En general, se producirá una especie de círculo virtuoso en el sistema económico.
Una espada de doble filo
Siempre está la otra cara de la moneda: ¿qué puede arruinar esta historia de amor entre las tasas de interés y el crecimiento económico? Como diría Milton Friedman, “there ain’t no such thing as a free lunch”. Arriba vimos con ojos de amor esta política, pero no hemos pensando en los defectos que puede presentar.
Pues, tener las tasas muy cercanas al 0% podría llegar a limitar el espacio para una nueva política monetaria. En ese caso, el BCRP deberá recurrir a otra herramienta para reactivar la economía o, en otras instancias, se daría pase a políticas fiscales. Asimismo, las tasas bajas, también, podrían hacer caer a la economía en lo que llamamos una trampa de liquidez, término acuñado por el economista J.M Keynes dado el contexto de la crisis del 29. En este caso, las tasas de retorno son tan bajas que las personas no van a invertir su dinero, sino lo van a dejar donde, en un contexto de crisis, creen que puede estar más seguro: debajo de su colchón. En otras palabras, la preferencia por liquidez se vuelve absoluta.
Otros países y el Perú
Los cambios de la tasa de la Reserva Federal de EE.UU. (FED) y del BCRP han coincidido en la misma dirección cuando sus ciclos económicos y la inflación evolucionaron de manera similar. Así, en respuesta a la crisis financiera, en los años 2008 y 2009, tanto el BCRP como la FED redujeron sus tasas de interés de política monetaria aka policy rate. No es sorpresa que, a medida que la FED disminuye su tasa, otros países también lo hagan. Las consecuencias de la caída de la policy rate de EE.UU. podrían llevar a muchos inversionistas, deseosos de rentabilidad, a mover sus capitales a países que paguen tasas más altas, como lo son los países emergentes. En ese caso, dichos países, incluido el Perú, podrían tener espacio para disminuir sus tasas y recortar esta “prima de riesgo” que hay en el mercado.
Por ello, en el 2009, fue normal que otros países se sumen en solidaridad de dinamizar la economía mundial. Tal fue el caso del Banco Central Europeo (BCE) que redujo su tasa hasta 3.25%. Esta medida provocó que dichas tasas se hayan mantenido bajas y, ante nuevas situaciones de riesgo, se reduzcan aún más, como ahora que bordean o sobrepasan el 0% tales como Japón: -0.1%, Suiza: -0.75% y Dinamarca:-0.6% (la FED la disminuyó en un rango de 0%-0.25%).
BCRP, MEF Y EMPRESAS
Las medidas impuestas por el gobierno y el BCRP tienen un mismo fin: reactivar la economía para evitar la ruptura de la cadena de pagos. ¿A qué hace referencia la cadena de pagos? Por ejemplo, soy una empresa y mis ventas se caen porque no tengo clientes. Entonces, quiebro. No tengo dinero para pagar mis préstamos ni a mis trabajadores, quienes, a su vez, no pueden cubrir sus gastos y deudas. De esta manera, el circuito que se construye se basa en que los gastos de unos son ingresos de otros.
En ese sentido, el MEF llevó a cabo el programa Reactiva Perú, un programa que busca otorgar 30.000 millones en préstamos para el sector empresarial, para que las empresas se refinancien y los empleos se mantengan. Por esa razón, la ministra de economía, María Antonieta Alva, garantizó que los bancos, como vehículos del instrumento, brindarán créditos a tasas bajas. Pero ¿cómo así lo harán?
El 14 de abril, el BCRP publicó la circular de operaciones de reporte de crédito con garantías del gobierno en título valores, en la cual se define las reglas de juego para bancas que quieran acceder a la liquidez de la institución para colocar créditos a través de Reactiva Perú. Posteriormente, este convocará a subastas u operaciones directas donde las entidades financieras “le venderán” su cartera de créditos. Estas reciben el dinero y, luego, deben recomprar estos “título valores” con pago de intereses. Para acceder a la liquidez del BCRP mediante subastas, las entidades financieras competirán por las tasas de interés que les cobren a las empresas y se priorizará a aquellas que cobren tasas más bajas. Si son por operaciones directas, esta tasa de interés será definida por el BCRP.
Con el mismo fin, hace unos días, se anunció la suspensión perfecta de labores, como una medida excepcional para salvaguardar empresas que se encuentran en una situación complicada. Además, se aclaró que empresas beneficiadas por las facilidades del gobierno, no podrán aplicar esta medida. Las Mipymes constituyen el 99.6% de las empresas formales del país, por lo que rescatarlas, también, implicaría en un cierto plazo recuperar los empleos además de contribuir con el crecimiento del país.
CONCLUSIÓN
Sin duda, la disminución de la tasa de interés de referencia en dos puntos porcentuales es una medida histórica de política monetaria en el Perú. En esta complicada circunstancia, es mejor tomar posturas alentadoras, como lo indica el reporte del Banco Mundial: “La prudente gestión macroeconómica de Perú le da al país un amplio margen fiscal, amortiguadores monetarios y externos para mitigar el impacto del shock”. No obstante, levantar la economía no solo requiere de medidas económicas de gran impacto. La economía no depende solo de ella. Si bien se valoran todos los esfuerzos que hacen las instituciones para mitigar el efecto de la pandemia, la responsabilidad también recae en los peruanos. Para regresar a una misma dinámica económica, levantar la cuarentena y estar con buena salud son pasos primordiales. ¡Hay que tenerlos presente!
Edición: Isabela García y Claudia Barraza