Durante la cuarentena, los ingresos de los peruanos se han visto deteriorados, pues muchos negocios tuvieron que cerrar y muchos trabajos no esenciales fueron prescindibles. Sin embargo, nuestras deudas no han desaparecido el banco jamás quiere perder. Si bien se han adoptado medidas para apoyar a aquellos deudores con problemas de pago tales como la reprogramación, refinanciación y congelamiento de deudas, ¿son realmente políticas beneficiosas? o ¿esconden algo que en un futuro será perjudicial? En las siguientes líneas, se explicará este tema en detalle.
En primer lugar, ¿qué es la reprogramación de deudas? Básicamente es decirle al banco: “No podré pagarte (al menos no completamente) lo que te prometí que te daría mañana, entonces ¿puedo pagarte un poco menos (o nada) el día de mañana, para que dentro un tiempo te pueda pagar lo que te debo?”. Es decir, sabes que estas aguja y que no podrás pagar la cuota (el monto a pagar) que prometiste pagar en el futuro. Por ello, (responsablemente) te acercas al banco antes de que te toque pagar esa cuota y solicitas un cambio en el contrato: puedes solicitar que se te reduzca una o más cuotas, de modo que el plazo de pago se extienda y puedas pagar la totalidad de tu deuda.
Hasta mediados de julio, las entidades bancarias en el país reprogramaron más del 50% de las deudas de sus clientes, según el último reporte de la SBS[1]. ¿Es esta reprogramación de deudas una medida beneficiosa? La respuesta es afirmativa, siempre y cuando el cambio en el contrato no perjudique significativamente tu posición financiera. Es cierto que la reprogramación de deudas no afectará tu calificación crediticia, es decir que conservarás tu apreciada “imagen financiera” (importante para solicitar futuros préstamos). No obstante, la modificación al contrato dependerá de la negociación particular que hagas con la entidad financiera. Por tanto, si la operación implica mayores intereses futuros, comisiones o algún pago moratorio tal que tu posición financiera se vea perjudicada en comparación a cómo estarías si no hubieses solicitado la reprogramación de la deuda, entonces ahí date cuenta que te la están haciendo no te conviene solicitar esta operación financiera. ¿Y si me han reprogramado mi deuda de forma automática? Afortunadamente, la ley peruana indica que no pueden reprogramar tus deudas sin tu consentimiento[2], por lo que estás en todo tu derecho de expresar tu desacuerdo con una reprogramación involuntaria de tus deudas.
Por otra parte, la refinanciación de deudas es similar a la reprogramación de las mismas, con la diferencia de que la solicitud del cambio de contrato para el pago de la deuda se hace cuando la(s) cuota(s) que no puede(n) pagarse ya han vencido. Es decir, te quedaste dormido y recién te das cuenta que no podrás pagar la cuota del mes pasado. Puesto que muchos compatriotas no gozaban de una buena situación financiera previa a la cuarentena, la refinación de deudas ha sido una medida involuntariamente necesaria para varios. ¿Es esta medida beneficiosa? Lamentablemente no. Dado que estás avisando tarde al banco que no podrás pagar lo que prometiste, esta operación financiera perjudicará tu historial crediticio. Además, es muy probable que el cambio en el contrato de pago implique intereses adicionales y/o comisiones que aumenten las cuotas de pago futuras que te dejarán mal parado. Además, ¿qué garantiza que en el futuro podrás pagar mayores cuotas?
Finalmente, el congelamiento de deudas significa decirle al banco: “Tomemos una foto de la deuda hoy y luego veámosla dentro de un tiempo para continuar el contrato”. Es decir, el contrato de pago solo se aplaza durante un tiempo mientras la deuda está congelada. Diversos bancos en el Perú han adoptado esta medida para ayudar a la población, sobre todo la más vulnerable. ¿Podemos decir que esta es la operación financiera más conveniente para los peruanos? En teoría sí, pero sabemos que los bancos son muy vivos y no quieren perder. Por ello, ¿realmente se congelan las deudas por ciertos meses o es que después del supuesto “congelamiento” se cobran mayores intereses y/o la cuota de pago aumenta sorpresivamente? Habría que ser muy cuidadosos con ello para no hacer un acuerdo financiero que nos deje con la soga al cuello.
Claro está que el pago de las deudas es un dolor de cabeza y que, pese a los intentos de ayuda por parte de los bancos, hay que ser siempre cautelosos para evaluar las opciones financieras disponibles. Todos desearíamos que se nos congelen las deudas por unos meses, pero es necesario recordar que el dinero tiene un valor en el tiempo: un sol hoy no es igual a un sol mañana. Esto último es bien sabido por los bancos en el país y tenemos que tomarlo en cuenta a la hora de negociar el pago de nuestras obligaciones financieras.
[1] SBS. (2020). INFORME-N-094-2020-SAAJ. Recuperado de: https://www.sbs.gob.pe/Portals/0/jer/opinion_proy_leg/INFORME_N_094_2020_SAAJ.pdf
[2] Artica, J. (2020). ¿Reprogramaron su deuda automáticamente? Sepa qué hacer si no está de acuerdo. Diario El Comercio. Recuperado de: https://elcomercio.pe/economia/peru/reprogramacion-de-deuda-sbs-bancos-reprogramaron-su-deuda-automaticamente-sepa-que-hacer-si-no-esta-de-acuerdo-coronavirus-peru-ncze-noticia/
Editado por Isabela García