Mientras que Greta Thunberg cruza el charco en velero para la Cumbre de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente, y Emmanuel Macron trata de alzarse una vez más como nuevo líder del “mundo libre” en una Cumbre del G7 aparentemente infructífera, por supuesto, la Amazonía ha visto focos de incendios como nunca antes. Por un lado, la G7 reunirá el desacuerdo de las viejas potencias industriales más que nunca por el factor “Trump”; y por el otro, existe la mirada desinteresada de un exmilitar que cree que las ONG están conspirando contra el gobierno de Brasil (solo le faltaría mencionar que Soros está detrás). Bolsonaro, serás el protagonista de los muñecos por quemar en año nuevo
Aquí en Univerzoom (incluso cuando nuestro jefe de área todavía era un humilde escritor más redactaba) hemos tocado el cambio climático, la sostenibilidad y el futuro del planeta con más énfasis en estos últimos meses (somos puros biólogos, no puedes esperar otra cosa). Así que escoger el tema para este artículo fue un ejercicio inmediato.
Los incendios que hoy sufre el Amazonas son causados por intereses agropecuarios. Si bien la temporada seca es usualmente la época donde bosques en todo el mundo sufren incendios (véase el caso de California), el hecho de que un bosque tropical se incendie con tal magnitud es parte de una estrategia donde la industria agrícola y ganadera aprovechan la facilidad con la que estos espacios pueden quemarse para instalar nuevas chacras o espacios de pastoreo para las vacas. En Univerzoom hemos hablado antes de agricultura intensiva, uso no ético del espacio, y del problema de los territorios indígenas de la Amazonía; por lo cual estamos conscientes de algo: cada año que pase será un año más que perderemos biodiversidad y estaremos más cerca de la catástrofe climática (aunque esto ya ocurre). Todo ante la pasividad del presidente (y de los grupos de interés) del país con el 70% del pulmón del mundo.
No les estamos contando nada nuevo. Si bien hay voces que con fundamentos mencionan que los niveles de partículas de CO2 emitidos por los incendios no han sido récord todavía en la Amazonía, no esperen hasta fin de año para sorprenderse. Pueden verlo en otras partes del mundo: olas de calor récord en Europa y América del Norte han precedido a las llamas de nuestro bosque. El planeta Tierra está siendo golpeado por todos lados, y no parece ser que en los próximos años esto sea más leve. No tendremos Amazonía suficiente que pueda aliviar estos efectos.
[imagen 2]
Esto puede sonarles algo catastrofista o sumamente pesimista; pero son efectos en la Tierra de los cuales se discute desde finales del siglo pasado. Que la clase política dominante en el globo no esté interesada en contrarrestar esto tiene que dar pie a que nosotros mismos estemos informados de lo que acontece. No hay más líderes políticos en este mundo al que podamos mirar para seguir modelos, solo hombres poderosos que no se arriesgan a sacrificar sus lobbies petroleros por el bien del planeta.
Hay una chica de 16 años que esta surcando un océano en bote por lo que ella cree firmemente. Eso puede darles una pequeña idea de que tal vez el momento de nuestra generación por el futuro ha llegado ya.
Edición: Daniela Cáceres