Seguro que has escuchado un millardo de cosas acerca de invertir en la Bolsa (que a muchos los enriquece y a otros los empobrece) o habrás tenido una pequeña inmersión en ese mundo al ver El Lobo de Wall Street. Quizás incluso has sido víctima de la cuantiosa publicidad de “Cómo invertir en Bolsa”, “Cómo hacerte rico invirtiendo en Bolsa” o esas otras h#evad@s de disque libertad financiera que, por desgracia, suelen ser solo publicidad engañosa.
Pero basta ya de estas falsas noticias, hoy VA te trae algo de realidad: la historia de James (Jim) Simons, un billonario de 80 años con una fortuna de 20 billones de dólares (casi 7 veces más la de Donald Trump). Jim no es un personaje cualquiera, es el fundador de Renaissance, uno de los hedge funds más exitosos del mundo y cuyo secreto del éxito se debe a que ha logrado predecir la Bolsa… con matemáticas.
James Simons ha tenido una vida entregada a este campo de estudios. Estudió Matemáticas en el MIT, creó la teoría Chern-Simons, que sirvió enormemente para establecer las bases matemáticas de la teoría de cuerdas (famosa en el mundo de la física) y fue descifrador de códigos estadounidense durante la Guerra Fría (sí, su chamba era interceptar mensajes de guerra ocultos y descifrarlos, un “capo”). Sin embargo, todo cambiaría en 1982: cuando Simons tomaría la decisión de fundar un hedge fund al que llamaría Renaissance (Renacimiento, en inglés) y todo lo demás se volvería historia.
¿Qué exactamente es Renaissance y cómo es su estrategia de inversión?
Renaissance Technologies LLC es un hedge fund. ¿Qué significa esto? Un hedge fund o fondo de cobertura es un acuerdo, sociedad o entidad de inversión en la que un grupo de inversionistas deposita su dinero o acciones al fondo. Es operada por un manager profesional que gestiona dicha riqueza para generar ganancias a los inversionistas. Es decir, tú como accionista podrías depositar tu riqueza en el fondo y al cabo de un año, te pueden devolver el doble y cobrarte una comisión por sus servicios.
La principal diferencia entre un hedge fund y otros fondos de inversión (como los fondos mutuos) es que solo es accesible a un grupo sofisticado de inversionistas, como grandes corporaciones que quieren invertir su riqueza (No cualquier “broder” puede poner su “plata” allí). Asimismo, estos fondos suelen tener estrategias de inversión más riesgosas en búsqueda de mayores retornos y están menos regulados. Históricamente, los hedge funds son conocidos por estar entre los instrumentos de mayores ganancias entre los fondos de inversión.
Si creías que esto ya era especial, Renaissance tiene una cualidad que lo aparta del resto: usa exclusivamente Quantitative trading como estrategia de inversión. Esto significa que emplea modelos computacionales, matemáticos y estadísticos para predecir el valor de los activos en los que invierte y así obtener ganancias. En las últimas 3 décadas, el fondo ha tenido resultados espectaculares, superando por más de 10 billones de dólares en ganancias a otros hedge funds conocidos, como el de George Soros. (AFR, 2016). En efecto, James Simons fue el segundo hedge fund manager con mayores ganancias el año pasado, totalizando 1.8 billones de dólares adicionales a su fortuna. (Forbes, 2018)
¿Cuál es el secreto del Quantitative Trading? ¿Cómo es posible predecir las acciones?
Podemos descomponer el éxito de Renaissance en tres factores: el equipo, los modelos y la información.
1.- El equipo
El fondo cuenta con el pequeño número de empleados (casi 300), de los cuales cerca del 30% posee un PhD. Más que de analistas financieros, es una comunidad de científicos que incluyen programadores, matemáticos, estadísticos, descifradores de códigos, físicos teóricos, entre otros. Para Simons, no es fundamental conocer de las finanzas antes de entrar al fondo, solo le importa que seas un “crack”. (Sí, si estudiaste una de estas carreras has cumplido con el requisito mínimo para el fondo… ¿Quién dijo que las matemáticas no sirven para nada?). Los fundadores iniciales, además de Simons, correspondían a colegas suyos con los que trabajó en IBM o en IDA (Instituto de Análisis de la Defensa) como code-breakers (AFR,2016).
2.- Los modelos matemáticos
Esta es la parte fundamental, que no podría haber sido implementada sin el equipo de científicos que conforman el fondo. Los modelos matemáticos han sido la única estrategia de inversión desde 1988. Iniciaron con los propuestos por el matemático Leonard Baum y fueron continuamente mejorando y calibrándose hasta la fecha. Simons describe este proceso como uno que consiste en la mezcla de desencriptación de códigos secretos – pues se trata de encontrar tendencias entre mucho ruido (Numberphile, Difusión Oral, 2015) – y machine learning. Por último, cabe resaltar que estos modelos son clasificados y se guardan bajo cautelosa custodia, con extensos acuerdos legales que aseguran la no difusión al conocimiento público.
3.- La data
De acuerdo a una entrevista con Simons, un componente vital adicional es la cantidad de información que el fondo ha almacenado desde hace 30 años. Según menciona, podría tratarse de millones de líneas de códigos cuyo peso podría medirse en Petabytes (1 petabyte equivale a 1 millón de gigabytes). (Numberphile, Difusión Oral, 2015). Por lo tanto, en palabras de Simons, la llamada eficiencia informacional no existe: para el genio matemático, existen anomalías, aunque difíciles de identificar, en los precios de ciertos activos que se mantienen en el horizonte temporal y estas pueden ser explotadas, así funciona Renaissance.
Finalmente, te presentamos algunas estadísticas para que observes lo bien que este hub de científicos ha rockeado y crackeado Wall Street.
¡Le han ganado al mercado desde 1990!
Su valor de mercado es de 90 billones actuales.