Hello Peter. Con los acontecimientos ocurridos durante los últimos meses, quizá hayamos oído que; para solucionar la pobreza en el país, lo más obvio es usar las reservas internacionales. Así, entendemos, que en el país existe una discordia entre los que encontraron la solución a la pobreza y los directores del BCRP, que aún no son capaces de ver esta “obvia” solución.
La pobreza es uno de los principales problemas que enfrenta el país y esta se incrementó considerablemente durante la pandemia del COVID-19. En este contexto, hemos sido testigos de la urgencia por dinero de parte del gobierno para cubrir gastos públicos, tanto en temas de salud como en subvenciones monetarias, para las familias más vulnerables. Una vez detectado el problema, debemos buscar la solución a este. Una respuesta que parecería muy simple sería usar las reservas internacionales. Veamos por qué esto no es así.
En primer lugar, hay que recordar que las reservas internacionales netas (RIN) son los activos de reserva menos los pasivos internacionales, que administra el Banco Central de Reserva y que le permite actuar ante situaciones extraordinarias. En otras palabras, las RIN son los activos con los que dispone un país (oro, plata, billetes, certificados de depósito, etc.). Estos son, mayormente, activos muy líquidos (se pueden intercambiar fácilmente) y son usados cuando el país enfrenta problemas macroeconómicos (choques externos, como por ejemplo la fuga de capitales del sistema financiero). Se podría decir entonces que tener reservas no es un lujo; todo lo contrario, es una necesidad para todo país.
Seguramente estará pensando, en que todo esto es pura teoría fría y nada tiene que ver con la realidad. Además, es lógico pensar que la pobreza es un tema urgente y que miles de familias viven en condiciones de mucha necesidad. Esto es cierto y no se puede negar ni esperar que se solucione automáticamente, pero el uso de las reservas internacionales no es el camino. Déjeme mostrarle el siguiente ejemplo:
Suponga que gastamos todas o gran parte de las reservas internacionales en subsidios y todo tipo de ayuda económica para las familias más pobres del país y supongamos también, que no existe corrupción en todo el proceso se permiten las risas. Bien, analicemos el escenario ¿cuáles serían las consecuencias de no contar con reservas internacionales? Para explicar esto recuerde cuáles son los principales beneficios y así será fácil responder la pregunta
Primero, las reservas internacionales permiten al Banco Central intervenir en el mercado cambiaron disminuyendo la volatilidad del tipo de cambio. En realidad, esto se traduce a un ejercicio simple. Recuerde qué es más probable que suba por encima de los cuatro no son los puntos de Perú en la clasificatoria. Efectivamente, el dólar, pero esto sucedió con la intervención del BCRP inyectando cientos de millones de dólares de las reservas internacionales al sistema financiero, de otro modo hoy el tipo de cambio rondaría los cinco soles o más. Esto conduciría a un mayor aumento de los precios golpeando a la economía de los peruanos.
En segundo lugar, reducen la posibilidad de ataques especulativos sobre los activos líquidos del país. En otras palabras, se evita que los especuladores cambien sus activos en moneda nacional por divisas del banco central precipitando así la devaluación de la moneda del país. Para lograr este objetivo, los bancos centrales deben tener cantidades óptimas de estas reservas.
En tercer lugar, mejoran la percepción de riesgo del país. Seguro podrá recordar fácilmente este caso. Durante la crisis que trajo la pandemia en el año 2020 se escuchó mucho sobre los préstamos que había adquirido el país. Lo que se destacó de aquellas operaciones fue la cantidad de dinero prestado y la baja tasa a la que se endeudó el país. La deuda no es mala, pero ese es otro tema, lo importante es que la buena reputación macroeconómica y la capacidad de responder a las obligaciones adquiridas por parte del Perú lograron este objetivo. Uno de los principales indicadores para lograr esta reputación es precisamente los niveles de reservas internacionales.
La lista de beneficios de las reservas internacionales puede continuar y la teoría es más amplia, pero ya es posible generar una idea de lo importantes que son para una economía. Entonces, retornando al problema. Por un lado, gastar las reservas internacionales debilitaría la solidez macroeconómica y la hace susceptible a choques externos. Por otro lado, la pobreza no es un tema simple que se soluciona dando dinero a las familias pobres, sino que el camino parte por un tema de servicios básicos de calidad, amparo de la ley, oportunidades de microcréditos, entre otros.
En conclusión, las reservas internacionales son un pilar de la macroeconomía del país y permiten mantener una economía estable que impulsa el crecimiento. Gastarlas para intentar solucionar la pobreza es un camino inviable que haría más daño que bien. Es así, fiel lector, que cuando escuche estas soluciones “prácticas” a problemas tan complejos podrá recordar que todo tiene un porqué y una función que cumplir.
