La educación es una de las principales herramientas para el desarrollo y es prioritario apostar en ella. No obstante, como dice el refrán “del dicho al hecho, hay mucho trecho” y en este camino, además del componente técnico, entran en juego diversos intereses políticos y económicos. Los últimos días, desde el Parlamento y a raíz de la organización de los Juegos Panamericanos, el Ministerio de Educación estuvo en el centro de la discusión. ¿Qué es lo que está pasando? ¿Existen otros intereses detrás? En Voz Actual te lo contamos en 5 puntos.

1. Saavedra, Ministro de Educación

La aceptación de Saavedra y su trabajo realizado en el Ministerio de Educación (MINEDU), llevó a que PPK lo mantenga en el cargo. De hecho, fue el único Ministro que continuó en el Gabinete tras el cambio de Gobierno. Mantenerlo en su posición refleja una continuidad de las políticas, algo que solemos exigir pero que pocas veces se realiza. La labor de Saavedra no ha estado libre de críticas, pero en general ha logrado despertar un interés grande en el sector. Ahora bien, las críticas recibidas en las últimas semanas, dirigidos en varios casos directamente a su persona, pueden esconder intereses detrás que son importantes considerar.

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Ministro Saavedra

2. Ley Universitaria y SUNEDU

La Ley Universitaria y la creación de la SUNEDU han sido medidas que despertaron intensos debates. La propuesta de ley fue impulsada por el congresista Mora, y es la SUNEDU (Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria), ente adscrito al MINEDU, la encargada de garantizar condiciones básicas de operación en las universidades. ¿Se debería regular las universidades privadas? ¿La SUNEDU cuenta con las herramientas suficientes para llevar a cabo exitosamente su misión? ¿Se vulnera la autonomía de las universidades? Son algunas de las preguntas que están en cuestión. No obstante, la realidad es que la educación superior en el país, con más de 100 universidades y muchas de muy baja calidad, no está funcionando adecuadamente. Se necesita actuar y la SUNEDU carga con esta importante responsabilidad.

¿Cuál es la relación de estas reformas con Saavedra y el MINEDU? El Ministro también ha salido a defender la ley y mantener la SUNEDU fue incluso parte del acuerdo al cual llegó cuando conversó con PPK para continuar en el Gabinete. Así, la figura de Saavedra, considerando además su aceptación, cobra un papel político importante para la defensa de la reforma en la educación superior.

 3. Juegos Panamericanos: ¿cómo entran en la discusión?

El IPD es otro ente adscrito al Ministerio de Educación y es el órgano rector del Sistema Deportivo Nacional. Así, el MINEDU cumple un papel dentro de la Organización de los Juegos Panamericanos del 2019. De hecho, participó en la elección del presidente del Comité Organizador, y también pasarán por el Ministerio diversas transferencias de dinero para la organización de los Juegos. Ahora, si bien es cierto todavía no se ha empezado con las obras, según los cronogramas mostrados, todavía se encuentran en fechas de pre-inversión y trámites administrativos. Es un proceso lento y que requiere mayor voluntad, liderado lógicamente por el MINEDU. En todo caso, es positivo que se haya despertado el interés político, es necesario, pero esperemos que sea un interés genuino.

En este punto es importante aclarar que no es verdad que esta gestión del MINEDU no esté haciendo esfuerzos en el sector deportivo. Sí existe interés y se está trabajando en mejores políticas, como el Plan Nacional de Fortalecimiento de la Educación Física y un Plan Deportivo Nacional a través del IPD. Es un avance, aunque todavía falta más.

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El edificio del MINEDU, ¿encuentras algo particular en el diseño?

4. ¿Oportunidad para la oposición?

La ley universitaria y el papel que está desempeñando el MINEDU no son del agrado de todos. Respecto a su papel en la regulación de instituciones de educación superior, se ha llegado incluso a comparar el estilo del Ministerio actual con el de un “modelo velazquista”. No obstante, un primer paso necesario es justamente garantizar que las universidades cumplan con un mínimo de exigencias respecto a su infraestructura, profesores y los servicios brindados.

Existen diversos análisis que han puesto en descubierto los intereses de fujimoristas y apristas detrás de la reforma en la educación superior (por ejemplo, la interesante reflexión de Rosa María Palacios). ¿Qué hay detrás? Desde la desregulación de la década de los 90, el número de universidades creció con poco control; el problema es que se juega con la ilusión de la población de recibir educación superior, cuando el servicio brindado es de pésima calidad.  En muchos casos se trata de una verdadera estafa. Sin embargo, los beneficios para los dueños de estas universidades son grandes y no piensan ser cedidos fácilmente. Esta situación, sumada a una corrupción extendida en muchas universidades, lleva a que los involucrados busquen defenderse a través de contactos o con favores. Es una lucha constante. Desacreditar al Ministro es parte de la estrategia para empezar a criticar su perfil y algunas de las reformas que representa.

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 5. Defender la reforma

Toda reforma, con mayor razón dada la magnitud del sector educación, es muy perfectible. No obstante, esto no debería implicar dar marcha atrás. En el Congreso, terminada la discusión respecto a las facultades legislativas, se van a abrir nuevos frentes de batalla o tensión con el Ejecutivo. Es lo esperable. La reforma en la educación superior, dado los múltiples intereses detrás, será posiblemente uno de ellos. Se nota una atención particular sobre el actual ministro. Existen muchas cosas que se pueden hacer mejor – entre ellas la organización de los Juegos Panamericanos – por lo que es necesario debatirlo. No obstante, también es importante mantenernos atentos a los distintos fuerzas que aparecen detrás: intereses particulares no pueden estar por encima de la búsqueda de una educación de primer nivel.