El Perú gracias “2020 sorpréndeme” confronta al COVID-19, virus que fue subestimado en el país y al cual Vizcarra contrataca a diario mediante medidas drásticas. Aunque la desesperanza invada, no se puede dejar pasar por alto que algunos países ya están enfrentando de manera exitosa esta pandemia. Alemania y Corea del Sur son ejemplo de eso. Si bien son países desarrollados y la diferencia con Perú es significativa, analizar estos casos esclarecerá el panorama acerca de cuáles son los factores determinantes en este tipo de situaciones.
El caso alemán es sorprendente. Esta potencia cuenta con alrededor de 28865 personas infectadas, mientras España cuenta con 33089 e Irán con 23049. No obstante, la diferencia entre el número de fallecidos de estos es abismal. Según el diario El País, la tasa de letalidad (o mortalidad) que presenta Alemania es de aproximadamente 0.4%, mientras la de España e Irán bordean el 4% y 7.5%, respectivamente. Como acabas de leer. Asimismo, cabe recalcar que su locación geográfica cerca de países que todavía son golpeados ferozmente por el virus – como España cuya tasa es de 8% – no la ha afectado. Antes de que consultes a los mayas el porqué, continúa leyendo.
Tras la existencia del paciente 0 en Alemania y mientras los países cercanos a este no presentaban casos, Merkel – junto al comité permanente de vigilancia y el sector privado – dispuso la realización de pruebas de diagnóstico de manera masiva. Doctores del instituto Robert Koch (Alemania) declararon a la BBC que estos exámenes dieron conocimiento de la mayoría de los casos en etapa inicial, lo cual les permitió enfrentar al virus a tiempo. En el Perú, Vizcarra anunció en uno de sus mensajes al mediodía la autorización al MEF de comprar 1.6 millones de pruebas. A esta, se le suma la donación de medio millón de pruebas realizadas el último domingo por la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía.
Otro regulador de esta tasa es el equipamiento de los hospitales alemanes. La proporción de camas hospitalarias es de 8 por cada 1000 habitantes. La realidad entre dichos hospitales y los peruanos, lamentablemente, es muy diferente. Una clara muestra de aquello son las denuncias efectuadas por el personal de Essalud, quienes dieron a conocer que en plena crisis epidemiológica solo 4 de cada 10 doctores se encuentran correctamente equipados. Realizar un número considerable de pruebas no será efectivo si el personal médico pone en riesgo su salud.
“Bali bali” (“rápido, rápido”) actuó Corea del Sur frente al Coronavirus. Tal como Alemania, ante el primer caso, dispuso estado Emergencia Sanitaria y la ejecución de prueba. Un dato muy interesante es que el despistaje se daba en estaciones fuera de la ciudad, que tenían una dinámica similar al servicio drive-in de las cadenas de comida rápida. Estas se ejecutaban sin tener que bajar del auto y un médico, correctamente equipado, se acercaba a cada pasajero y realizaba la prueba. De esta forma evitaban la saturación dentro de los hospitales y reducían el riesgo de que personal médico se contagie. #BienPensadoWoody
Tras los resultados, los contagiados tuvieron que cumplir la medida de aislamiento social obligatorio por 15 días. Corea del Sur no implementó ninguna otra medida – a diferencia de Perú – dado que la población acató lo estipulado. Únicamente con esta medida obtuvo una tasa de letalidad de 1.1% mientras contaban con 9037 contagiados. Siendo esta, según El país, una de las tasas más bajas alrededor del mundo.
En ambos casos, la temprana aplicación de pruebas logró mantener el control de la situación. Los amigos de Robert Koch señalaron a El País que Alemania puede efectuar 4000 pruebas por cada millón de habitantes, mientras Corea del Sur más de 5000. Hasta el cierre de este artículo, según el MINSA, el número de prueba realizadas en el país es de 8040; la buena noticia es que en pocos días arribará el significativo lote mencionado líneas más arriba. Como se mencionó, la aplicación de estos no debería exponer al personal médico. Desafortunadamente, según el presidente de la Federación Médica del Perú casi el 6% de los contagiados lo compone dicho grupo. La capacidad del sistema de salud es un factor clave en esta lucha y esto demuestra que no solo mejorará conforme el presupuesto aumente, sino cuando el cambio sea estructural.
Para Waldo Mendoza, profesor del departamento de Economía de la PUCP, la capacidad médica no es el único factor inmiscuido en este asunto, la capacidad gubernamental en cuanto a la imposición del aislamiento social es un factor determinante. Fue este último el que implementó Vizcarra: cuarentena y toque de queda, ante la “viveza” de la población. Dicha variable permitirá la retención del virus y aminorar los costos en caso la situación empeore. Fue una decisión acorde al contexto peruano, el cual se avizora como uno de los mejores de la región empero todavía lejos al de Alemania y Corea del Sur.
Editado por Isabela Garcia.