El humor negro ha sido una forma de comedia que ha existido desde los años 40s y 50s, principalmente en el cine y las producciones audiovisuales. Este se asociaba con el denominado “cine negro”, donde se presentaba una visión irónica y crítica de la realidad a través de situaciones oscuras y criminales. Aunque en la actualidad ha migrado hacia otros espacios, no ha perdido la sustancia que lo caracteriza. Recientemente, ha surgido un debate en la opinión pública sobre el humor en general y en particular sobre el humor negro. Pero ¿qué se entiende exactamente por humor negro? Para muchas personas, este tipo de humor se percibe como una herramienta para denunciar situaciones, especialmente desde un punto de vista político. Derenne (2022), creadora de tiras cómicas, sostiene que “el humor es una forma de tomar distancia de las cosas en este mundo complicado y vivir de manera más ligera” (Mundiario: Primer periódico global de análisis de opinión).
Mafalda, tira cómica que trata el racismo en un humor satirizado.
Fuente: El Mundo Today
En el contexto de la comedia posmoderna, se comprenden dos aspectos importantes. Por un lado, según el comediante y escritor Pepe Pelayo (2019) se afirma que si existe el humor blanco, que se caracteriza por ser inocente y sin contenido ofensivo, por contraste también existe el humor negro (Mundiario: Primer periódico global de análisis de opinión). Este tipo de humor se basa en el sarcasmo y en una aparente insensibilidad, pero su objetivo principal es desdramatizar la vida sin llegar a generar daño.
Según lo observado en los últimos años, nos podemos preguntar por qué las poblaciones vulnerables son usadas para el humor negro o por qué el humor negro es usado comúnmente con este grupo. Job Mansilla (2022) declaró en La República lo siguiente: “Un comediante de stand up, explica que la sociedad tiene miedo a lo desconocido y diferente. Al hacer chistes sobre temas como el feminismo, las personas afrodescendientes o las personas con discapacidad, lo que realmente busca el comediante es generar una conversación y un debate en la opinión pública y en las familias”. Entonces, Mansilla enfatiza que el error de un comediante no está en lo que dice, sino en no comprender lo que dice.
Entonces, ¿es válido reírse de chistes con temáticas sensibles? Mansilla (2022) responde a esta pregunta para La República afirmando que no hay nada más liberador que reírse de algo que supuestamente debería hacernos llorar. La comedia tiene el poder de separarnos de los temas que consideramos tabú y hacernos creer que esos problemas no nos afectarán personalmente, cuando en realidad están presentes en nuestra sociedad. La clave para que un chiste funcione radica en la intención y en la ejecución del mismo.
Por ejemplo, uno de los temas abordados por el humor negro en Perú es el racismo, especialmente aquel que proviene de la clase alta. Jaime Ferraro, comediante de stand up, ha sido reconocido por su contenido en el que satiriza y ridiculiza el racismo arraigado en ciertos sectores de clase alta de la sociedad peruana. A través de su humor, Ferraro busca desafiar los estereotipos y prejuicios raciales, exponiendo de manera cómica la actitud discriminatoria de aquellos que se consideran superiores por su origen étnico.
Fotografía del comediante Job Mansilla, en Barranco, donde se tocó temas
polémicos con una visión crítica y humorística. Fuentes: Job Mansilla, YouTube
En este punto podemos preguntarnos: ¿Existen límites en el humor? Hablar de esto es sumamente subjetivo y complicado de definir, ya que diferentes personas tienen diferentes sensibilidades y puntos de vista. Censurar o cancelar el humor simplemente porque alguien se haya sentido ofendido resulta absurdo. Siempre habrá alguien que se sienta ofendido, ya que el humor busca jugar y desligar las emociones de la persona para convertirlas en algo lejano. Al mismo tiempo, es crucial distinguir el humor de la humillación y la denigración de las personas, evitando convertirlas en objeto de burla.
Según Santiago Roncagliolo (2018), en una entrevista en RPP, reconocido periodista y escritor peruano, afirma que los peruanos han recurrido al humor negro como una forma de aliviar el peso de la vida y su complejidad. De igual forma, en el mismo medio televisivo, Roncagliolo afirmó que el humor negro representa una especie de venganza contra las tragedias de la vida, permitiéndonos encontrar un respiro a través de la risa.
En conclusión, es fundamental comprender que el humor negro no busca menospreciar ni herir a las personas, sino que busca señalar las contradicciones y los problemas sociales de una manera crítica y satírica. Al reírnos de ciertos aspectos de la realidad, estamos ejerciendo una forma de liberación y resistencia frente a las adversidades. No obstante, es necesario tener en cuenta que el humor negro puede ser percibido de manera diferente por cada persona y lo que para algunos puede ser divertido y desafiante, para otros puede resultar ofensivo.
Editado por Anel Ochoa