Un clásico, pero útil repaso de la temporada de premios.
Canchita con la sal en su punto, una jarra de chicha morada, ventilador prendido y ventanas abiertas. Son las ocho de la noche de un siete de marzo, salí antes del cumpleaños de mi amiga del colegio para no perderme esto que, según mi mamá, es importante y divertido, además de que estará Meryl Streep. Realmente espero que lo sea y realmente quiero que aparezca. Empieza el programa y no despego los ojos de la pantalla hasta media hora antes del final, cuando el sueño me gana. No importa, fue bueno mientras duró.
Tenía ocho años cuando vi por primera vez una gala de los premios Oscar y, desde entonces, fantaseo semanalmente con la posibilidad de encontrarme a Alfonso Cuarón en un irreal viaje a México y que me elija como la protagonista de su nueva película. ¿Qué les puedo decir? Soy una declarada fanática de la temporada de premios: desde los otorgados por crítica, pasando por los del sindicato y terminando en los de la Academia.
Y es justo de eso de lo que quiero hablar (porque este artículo tiene que llegar a algún punto): ¿por qué tantas premiaciones? ¿En qué se diferencian? ¿Por qué lo único que puedo ver los domingos por la noche en TNT es a las mismas personas en diferentes atuendos? ¿Por qué estas personas gastan cientos de dólares en ir a una premiación a la que muchos ni siquiera están nominados? ¿Por qué escribo estas preguntas cuando no voy a contestar ni la mitad de ellas?
La verdad, es que cada una de estas galas tiene su porqué y su para qué (o al menos eso defienden). Y si bien no voy a hablar de todas, las más conocidas están mencionados en esta clásica lista.
Golden Globes
6 de enero
Los Golden, elegidos por la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood, son equivocadamente, para muchos, el inicio de la temporada de premios. Estos, a diferencia de los Oscar e igual a los SAG’s, tienen categorías para las producciones televisivas. Sus premios mayores, por otro lado, son dos. Uno para mejor película musical o comedia y otro para mejor película drama. En el 2017, esta separación marcó la diferencia entre las dos favoritas de la crìtica: La La Land y Moonlight. Este año, el Golden en la primera categoría fue para Green Book y, la segunda, para Bohemian Rhapsody. Quién sabe, quizá en esta 91°. edición de la Academia volvemos a tener una competencia tan reñida.
Screen Actors Guild
27 de enero
Los premios del sindicato de Actores suelen ser un importante termómetro para los Oscars. Esto debido a que, de hecho, la mayor parte de sus 5000 integrantes también son miembros de la Academia. Una de sus mayores diferencias con la estatuilla de oro es que su mayor categoría de no es “Mejor película” sino “Mejor elenco”. El ganador de este año, sin duda alguna, ha dejado a más de uno confundido y, en cierta manera, expectante por lo que pasará en febrero: Marvel amenaza con llevarse la estatuilla más importante a Wakanda.
Los premios de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas
24 de febrero
Mayor conocido como “Los Óscar”, por el nombre de su estatuilla, es la premiación más importantes en la industria cinematográfica. La Academia tiene más de 6 mil miembros que se dividen en 17 áreas como sonido, fotografía, diseño de producción, dirección, actores, vestuaristas, maquillistas, documentales, casting, música, guionistas, efectos visuales, etc. Los nominados son elegidos exclusivamente por los miembros de cada rama y, una vez anunciados, la votación se abre al resto de integrantes de la academia. Es por esto que los premios anteriormente mencionados son tan importantes, porque algunos (?) miembros de la academia se guían de estos resultados para “identificarse” con alguna tendencia y elegir a su favorito.
Cómo se habrán dado cuenta, la situación este año es confusa no solo para el público, sino para los propios expertos. Mi recomendación: aprovechen que estas semanas los cines repiten las películas más nominadas y tengan una favorita personal. Quizá no acierten en todas las cábalas, pero van a pasar un buen rato sufriendo al lado de su elenco, director, vestuarista o actor favorito.
Por último, ya saben, si este 25 de febrero ven a una chicha llorando por las calles porque Olivia Coleman no ganó a mejor actriz por su increíble papel en The Favourite, díganle que al menos llegaron al final de este artículo para que se sienta un poco mejor.