Nuestros padres y abuelos suelen preocuparse de que terminemos una carrera universitaria y luego consigamos un buen empleo en el que nos quedemos bastante tiempo (si no es toda la vida). Esto está bien, es una muestra de que nos aman, y de que se preocupan por nosotros y sobre qué será de nuestras vidas. Sin embargo, el paradigma ha ido cambiando con el paso del tiempo: ahora los jóvenes valoramos otros factores en vez de la cantidad de salario que pagan en una organización. Esta transformación tiene entre sus causas mayor oferta de empleos y mejora en la calidad de vida.
¿Qué es la renuncia silenciosa?
Si bien el cambio ya se venía dando desde las últimas dos décadas, con la llegada del 2020 y a raíz de la pandemia, los trabajadores somos más selectivos con los trabajos y hasta nos damos el lujo de dejarlos. Ahora más que nunca en la historia moderna, la fuerza laboral está dándose más a respetar. Este año se ha puesto en boga el término “renuncia silenciosa”. A simple lectura, uno podría pensar que se trata de una gran cantidad de renuncias, pero no es así. Simplemente, los empleados se hacen respetar y cumplen con lo establecido en su contrato.
Renunciar silenciosamente consiste en realizar tus labores en el tiempo acordado. No debería ser razón para darle un nombre en particular, pero se llama así porque se busca hacer contraste con la nociva cultura de trabajo excesivo que se ha difundido en la población. Esta cultura de embriaguez laboral es perjudicial para las personas porque se acostumbran a realizar constantemente trabajo no remunerado y/o o hacer funciones en la casa luego de la jornada laboral.
En la imagen siguiente podemos ver los resultados de la evaluación a 2801 jefes. Es resaltante que mientras los líderes van obteniendo peores resultados, sus empleados van aumentando la práctica de renuncia silenciosa y se esfuerzan menos por realizar más de lo que se les exigen.
Causas
La falta de dar un esfuerzo extra en el trabajo no es debido a la falta de voluntad de los empleados. Por el contrario, una investigación de Harvard Business Review muestra que la razón de la renuncia silenciosa es tener malos superiores. Así, está investigación abarcó a 2801 jefes que fueron evaluados por trece mil subordinados.
Los resultados nos muestran que los líderes con mejores calificaciones tienen el 62% de trabajadores que ponen más dedicación a sus labores y otro 3% que practica la renuncia silenciosa. En cambio, los peores líderes tienen solo el 20% de su equipo que está comprometido con su empleo y un 14% que cuenta los minutos por irse. Es decir, ¡el liderazgo puede mejorar hasta 3 veces el desempeño del personal!
Otra razón importante es el estrés y la fatiga que sienten los trabajadores. El 61% de los trabajadores que han practicado la renuncia silenciosa, o han pensado en hacerlo, indican que la razón es el agotamiento laboral, el cual es consecuencia de realizar demasiadas funciones y horas extras no contempladas en el contrato. Con estos datos, se reafirma la hipótesis de que las personas eligen trabajar en lugares en los que se sienten a gusto; esto depende de factores como el sentido de pertenencia, bienestar, balance vida – trabajo, entre otras razones psicológicas.
Ventajas
- Mejores relaciones laborales: al enfocarse en cumplir el trabajo y funciones estipuladas en el contrato y acordadas con el jefe, se pierde el sentimiento de estar en competencia con los compañeros de trabajo. Por otro lado, al estar más aliviados, los empleados serán más felices, lo que los lleva a ser más amigables y, en consecuencia, mejorar el ambiente laboral, que es un factor determinante en la rotación laboral.
- Adiós burnout: una vez que los trabajadores dejan de sobre preocuparse y trabajar en exceso, vivirán más tranquilos y con menos estrés; por consiguiente, la fatiga no será un problema para ellos. Significa un gran avance al agotamiento general que vivimos los oficinistas actualmente.
- Salud mental: un gran reto en la actualidad es conseguir un equilibrio entre el trabajo y la familia. Este problema no solo afecta a los cargos de jefaturas y gerencia, sino asistentes y analistas también tienen problemas para respetar sus tiempos. Cuando logras desconectarte de la oficina y disfrutar del tiempo libre y vida personal, verás mejoras en tu salud, tanto física como mental.
¿Qué nos deparará el futuro?
Como hemos visto en este artículo, la renuncia silenciosa se da porque los trabajadores somos más productivos gracias a las herramientas y conocimientos que tenemos. Según el área en que trabajas, las funciones que realizas puedes hacerlas en media jornada laboral. ¡Esto significa que tienes cuatro horas libres! Sin embargo, la mayoría de las empresas siguen obligando a estar en oficina ocho horas, cuando tranquilamente podrías irte antes o trabajar desde tu casa, o desde donde tú quieras.
Si las organizaciones quieren ser competitivas y atraer los mejores talentos (que les ahorren tiempo, dinero y mejoren sus procesos), deben adecuarse a los cambios. A causa de la pandemia, varias empresas implementaron el trabajo remoto; no obstante, hay muchas otras que siguen aferrándose a la presencialidad cuando podrían no gastar en alquiler y tener a sus empleados más satisfechos. Finalmente, todos ganan con las mejoras: tanto los dueños como los trabajadores.
Editor: Juan Diego Linares
