Estamos a mitad del invierno y posiblemente tu cama y Netflix (o tu plataforma de streaming favorita) te parezca la mejor opción para pasar el fin de semana.
Pero… ¡Busca tus maletas! Mientras nosotros nos arropamos, la naturaleza cobra vida en muchos lugares del país. Aquí te contamos los estelares del invierno peruano.
LAS LOMAS COSTERAS
Este tipo de cobertura vegetal se localiza en las estribaciones andinas cercanas al mar (prolongaciones de la cordillera en la costa), en el gran desierto costero del Perú y el norte de Chile. El verdor de las lomas se forma por la baja temperatura de las aguas marinas continentales, que recorre paralelamente a la costa, y al condensarse produce capas densas de neblina durante el invierno. Estas al ponerse en contacto con los primeros contrafuertes andinos (pequeñas montañas que a veces llegan hasta el mar) precipitan, generando así los altos niveles de humedad que requiere este tipo especial de vegetación.
En ellas encontramos muchas especies autóctonas de flora, también escurridizos mamíferos como los zorros, además de ser hogar de murciélagos, refugio de aves y distintos insectos, todos ellos acostumbrados a este ecosistema intermitente que solo aparece entre junio y octubre.
Las lomas más importantes en el Perú de norte a sur, son: las de Trujillo, Casma, Lachay, Lúcumo, Iguanil, Chancay y Chancayllo, Chilca, Pongo o Acarí, Jahuay, Atiquipa, Arantes, Yuta, Jesús, Yerbabuena, Atico, Camaná, Ilo y Sama. Así que busca la que te quede más cerca y ¡programa tu siguiente salida!
BALLENAS
En el Perú se ha registrado la presencia de 30 especies de cetáceos y podemos ver alrededor de 14 de ellas en el norte del país. Sin embargo, de julio a octubre, es posible apreciar un espectáculo por cortesía de la población de ballenas jorobadas (Megaptera novaeangliae) en los balnearios de Los Organos en Piura y Punta Sal en Tumbes.
¿Por qué las jorobadas llegan en invierno?
Las ballenas jorobadas que llegan a nuestras costas pertenecen a la población del Pacífico sur. Esta pasa los meses de verano en la región polar de la Antártida, donde se dedica a alimentarse principalmente de krill, luego migra en invierno al trópico (El norte de nuestro País), donde el clima le permite realizar su reproducción, nacimiento y crianza.
Dato extra: Los ejemplares que verás suelen ser adultos solos o madres acompañadas de sus crías. Así que probablemente tendrán un tamaño de 12 a 16m con 36000 kg, mientras que los recién nacidos miden 4.5 m en promedio (y pueden llegar a mamar hasta 400 litros de leche al día).
NEVADOS
El descenso de las temperaturas en el invierno engalana la cordillera blanca produciendo una vista admirable. Ejemplo de ello es el Nevado Alpamayo considerado uno de los más bellos del mundo. Ubicado en el Parque Nacional Huascarán, este nevado tiene un área glaciar de 4.69 kilómetros cuadrados y se encuentra a una altitud mínima de 4,745 m.s.n.m. Este es un ejemplo de varios nevados que durante el invierno se cubren completamente de blanco y ofrecen distintos retos para todos los tipos de turistas, desde los más deportistas que disfrutan del alpinismo, hasta aquellos que prefieren observar desde la ventana del auto.
El invierno también es sinónimo de ausencia de lluvias en la sierra de nuestro país, lo que significa que esta región nos ofrecerá sus más hermosos paisajes en todo su esplendor. Es definitivamente la mejor temporada para ese viaje a la montaña Siete Colores que tanto has pospuesto.
¡¡¡HORMIGAS!!!
Entre Agosto y Septiembre, el inicio de las fuertes tormentas indican a la población de San Martín que ¡la temporada de hormigas inició! y es la Hormiga Siquisapa (Atta Laevigata) la reina del festín. Esta cortadora de hojas es nativa de América, habita desde Colombia hasta Paraguay. En nuestra Selva suele tostarse y comerse solas o en diferentes platos. Esta costumbre se ha convertido en un atractivo turístico. Es importante resaltar que además de ser deliciosas aportan proteínas y distintos nutrientes al cuerpo.
¿Por qué salen en época de lluvias? Es la época en la que las hormigas reinas, que son las que se utilizan en la comida, salen de sus colonias (al parar la lluvia) volando y se alejan para iniciar el vuelo nupcial. Durante este vuelo, los zánganos que son los únicos machos de la colonia, fertilizan a las hormigas reinas como preámbulo a la colonización y fundación de nuevos nidos. Es entonces que los pobladores se preparan para atraparlas.
Debemos añadir además que los primeros meses del invierno es una buena fecha para visitar en la Selva baja, ya que la cantidad de lluvias es menor y en consecuencia disminuye también el nivel de ríos y lagos. Esto hace que sean mucho más accesibles para navegar o pescar. Además de permitirte hacer caminatas por los bosques que ya no están inundados.
Espero que esta pequeña muestra de las joyas que solo podemos apreciar en invierno en nuestro amado Perú los anime a planear sus siguientes aventuras. Y siempre con responsabilidad y respeto a la naturaleza.