Los niveles de crítica e intolerancia por la “ideología de género” han llegado a magnitudes deplorables. Lo más fácil es solo ver las tristemente famosas expresiones de Phillip Butters, indignarte y pedir, con justa razón, que este impresentable no vuelva a salir en radio. Sin embargo, es más importante darnos cuenta de que muchos de nosotros o de nuestros conocidos somos incapaces de poder discrepar de una postura sin llegar al insulto, al menosprecio, a la minimización. E incluso podemos tomar con gracia ese nivel de crítica, siempre que en el tema de fondo (y espero no las formas) estemos de acuerdo. ¿Por qué es tan difícil criticar sin atacar? ¿Qué está pasando en el Perú?

meme phillip

#prayforPhillip #SorryPhillip

¿Esto es reciente?

No. Recordemos bien la campaña presidencial del año pasado en la previa a la primera vuelta. Según IDICE, Alan Keiko punteaba las encuestas, Vero y PPK luchaban voto a voto, y Barnechea estaba ya rezagado en los resultados de las principales encuestadoras a días de la elección. Muchas personas de un círculo cercano al mío, temerosos de una segunda vuelta Vero – Keiko, afirmaban cosas como lo siguiente:

  • ¿Votas por Barney? ¡No seas pavo, cómo vas a desperdiciar tu voto! ¡PPK es la voz!
  • ¿Votas por Vero? Pucha, no sabía que eras terruco, cómo vas a votar por esa roja que no ha hecho nada en su perra vida (ah no, sorry, ese fue PPK…)
  • ¿Votas por Keiko? ¿En serio avalas la corrupción? ¿En serio apoyas la idea de un Narco Estado?

¿Quién en su sano juicio avalaría la corrupción o el Narco Estado? ¿Quién en su sano juicio votaría por una terruca con todo el daño que hizo el terrorismo al país? ¿Desde cuándo votar por alguien es sinónimo de ser “pavo”?

Tomando muy en cuenta que los niveles de acceso a la información son diferentes entre los peruanos, así como nuestra capacidad de asimilación de las noticias, no debemos asumir nunca que “tenemos la razón” porque “entendemos mejor lo que pasa”. ¿Y si los que se equivocan somos nosotros? Lo que creo debemos hacer es defender nuestra postura con argumentos, pero SIN menospreciar a los que están en el otro lado de la cancha. Lanzar adjetivos es fácil. Argumentar y escuchar, no…Sino pregúntenle al ex conductor de Radio Capital…

Phillip Butters vs Don Panta Salvador del Solar… ¡qué diferencia!

Comparemos respuestas… primero viendo al periodista. Observemos su nivel argumentativo. ¿Qué te hace sentir?

“Yo no confío en pobres diablos como Gastelumendi. Si él quiere tener su hija lesbiana o que su hijo sea homosexual y que tenga sexo a los 13, 14 o 15 años, que tengan ellos. Y que armen su orgía con los hijos de Marilú Martens. Que hagan su fiesta gay o trans con los hijos de PPK o Zavala…”

 Entonces, cuando salga a la calle la ministra Martens que alguien le meta la mano. Y cuando se dé vuelta que le digan “yo no te metí la mano”. Eso están haciendo con los niños.”

¿En serio para discrepar necesitamos decir que le metan la mano (mil disculpas por reproducirlo) a la Ministra? ¿O insinuar que los hijos del Presidente y el Premier tengan fiestas trans de esa manera tan despectiva? ¿No es más inteligente entender la postura del otro, no insultarlo ni creerte superior, pero sí mostrando lo sólido de tu argumento (incluso desde un punto religioso) como ya lo hizo el Ministro de Cultura Salvador Del Solar al responder al Arzobispo de Arequipa?

Tengo la impresión de que como sociedad le estamos poniendo la cruz a personas que consideramos que no entran en los moldes de nuestra manera de ver las cosas. Creo que esa reflexión cabe… Vale la pena que reflexionemos y pensemos si tal vez no somos injustos, si juzgamos a personas tan peruanas como nosotros, seguramente tan católicas como nosotros, a las que hoy le ponemos esa cruz. No voy a entrar en un debate, solo comparto esa inquietud”

Así, dentro de un marco de humildad y sin necesidad de decir que los que apoyan la marcha #ConMisHijosNoTeMetas son desinformados, no entienden lo que leen, se dejan manipular, son incultos, son intolerantes, son ridículos, entre otras cosas que he visto o leído, el Ministro fue capaz, incluso en un ambiente católico, de argumentar su postura. La verdad, admirable, y gran jale para el Ejecutivo.

¿Y cómo quedamos?

Pues, a mí también me duele un país desinformado. Particularmente, me parece triste ver que aún no todos podemos aceptar la homosexualidad como algo tan natural que ni siquiera merezca ser puesto a debate: la Constitución defiende la igualdad. Pero es mi opinión.

Jamás deberíamos menospreciar a otros por pensar diferente, ya sea porque están “desinformados”, porque defienden una religión “retrógrada”, o por la razón que sea, porque no somos dueños de la verdad. Defiende tu argumento, critica la otra postura, pero no ataques a quien defiende el otro lado. ¿Y si te estás equivocando? ¿Qué derecho tenemos de mandar adjetivos al otro? Porque al igual que cuando yo no votaba por PPK y me sentía realmente herido por todos los adjetivos que veía en redes sociales por no apoyarlo, ahora que estoy en el otro lado, no puedo dejar de ver lo fácil que nos parece atacar al otro. Porque como dijo el Ministro Del Solar, probablemente le estamos poniendo la cruz a personas que no entran en los moldes de nuestra manera de ver las cosas…