Hasta el 2019, este juego llegó a vender más de 110 millones de copias en todo el mundo. / Foto: Rockstar Games
Cuando comencé a dar mis primeros pasos en el mundo de los videojuegos, allá por el 2008, uno de los títulos que pude probar en su momento fue Grand Theft Auto III. Este juego publicado por la compañía Rockstar Games en 2001 fue el primero de esta saga en tercera dimensión (3D) y creó un hito revolucionario dentro de la industria. Cabe destacar que los dos grandes puntos a favor fueron la gran historia que llevaba detrás y que era un videojuego sandbox o de mundo abierto. Es decir, este tipo de títulos permite que el jugador tenga la posibilidad de moverse libremente por un mundo virtual y alterar cualquier elemento a su voluntad.
Con solo ver la cinemática inicial, la primera vez que entré al juego quedé impresionado. Saber que eres un ladrón de bancos que fue traicionado y que en un “golpe de suerte” logras fugar de un camión de policía para comenzar tu aventura, sin duda, era un argumento nuevo e innovador para mi poca experiencia en este mundo. Pero lo que más me asombró fue que ni bien puedes tomar control del protagonista ya estás abierto a realizar miles de actividades dentro de un mundo virtual completamente nuevo. Puedes ser desde la persona más correcta del mundo hasta convertirte en la peor escoria golpeando o matando a todas las personas que veas a tu alrededor.
A pesar de que los gráficos no eran su mejor fuerte y la tecnología en la industria aún tenía muchas limitaciones, este juego causó buena aceptación en el público y creó un gran cúmulo de fans de la saga alrededor del mundo. Gracias a esto, Rockstar Games pudo ir creando muchos más juegos para satisfacer a su fanaticada y de paso ganar más audiencia con el concepto que los llevó a la gloria: ser el protagonista de la historia con libertad de hacer lo que quieras.
De esta manera salieron títulos emblemáticos como GTA: Vice City (2002), San Andreas (2004), IV (2008) y V (2013), pero la que está dando de qué hablar en estos últimos días es la última entrega de esta saga que ha llegado para quedarse y marcar un legado en la industria de los videojuegos. Un legado que quizá sea muy difícil o, inclusive, imposible de superar.
Grand Theft Auto V cumplió con lo esperado: una excelente secuencia narrativa contada desde tres perspectivas, protagonistas con historias profundas y bien argumentadas, gráficos 10 de 10, cinemáticas fantásticas, una jugabilidad de calidad y un mundo virtual más que colosal. Si bien es cierto, este juego que mantiene su encanto durante las casi 30 horas de juego que ofrece la historia principal te permite conocer más la vida de Franklin, Michael y Trevor dentro del mundo virtual de Los Santos (recreación de Los Ángeles) no se ha convertido en la obra maestra de la década solo por esto, sino que va más allá.
Uno de los factores que llevó a que GTA 5 se convierta en una obra de arte es que al ser un juego de mundo abierto puedes explorar cada rincón del territorio en cualquier momento y así encontrarte con detalles interesantes o cuanto menos curiosos. Asimismo, este título cuenta con misiones secundarias o minijuegos que te mantendrán pegado a la pantalla de principio a fin.
Este gran título que se convirtió en el segundo juego más vendido en la historia de los videojuegos no ha ganado este puesto de la nada, y es que otro de los elementos que tiene es que abre la posibilidad de realizar miles de actividades in-game. Desde caminar y sacarle el dedo medio a los transeúntes, salir a correr o hacer ejercicios, manejar autos a velocidades impensables, fumar marihuana y toparte con extraterrestres que te quieren matar, hasta atracar bancos y pegarte a tiros con toda la policía, son algunas de las cosas que puedes encontrar en esta maravilla de juego.
Si vamos a Twitch, la plataforma de streaming más famosa a nivel mundial, podremos ver que la segunda categoría con más espectadores activos es por este juego (aproximadamente 67 mil personas). Asimismo, este juego tiene hasta la fecha más de 33 millones de seguidores a nivel mundial. Teniendo en cuenta que este título salió hace más seis años, ¿cómo es posible que aún tenga vigencia dentro del mundo gamer? Y es que, señores y señoras, GTA V está en el olimpo de los videojuegos gracias también a su modo multijugador que ofrece.
Para comenzar, tienes la total libertad de crear tu propio personaje a tu gusto y medida. Hay que tener en cuenta que dentro de esta modalidad existe una historia, no tan increíble como la historia principal, pero que sí cumple su función de entretener. Ahora, al muy puro estilo de GTA estás en la posibilidad de seguir este guion como también puedes obviarlo y concentrarte en jugar con tus amigos. Aquí es donde aplica la misma función de hacer lo que quieras llevado a un siguiente nivel. Puedes cumplir un rol dentro de la ciudad e interactuar con otras personas en una simulación de la vida real, echarte unas carreras competitivas con desconocidos, asaltar bancos o tiendas con amigos, golpearte o dispararte con otros personajes hasta la muerte, entre otras actividades que nacen a partir de tu creatividad.
GTA V Online llega a ser muy adictivo con estas mecánicas de mundo abierto y libre albedrío. Al principio todo parecerá muy limitado, pero las alternativas que se van abriendo con el paso del tiempo llegan a ser muy suculentas. Y es que Rockstar Games no nos ofrece simplemente un juego más para el catálogo, si no que hace grandes obras donde lo primordial es que tú creas tu propia experiencia y montes tu propia historia. Ellos solo ponen las herramientas, ya tú eres el que le saca provecho a todo lo que te ofrecen #TúMismoEres.
Escrito por: Aarón Alvarado
Edición: Kelly Pérez V.