Las elecciones en Rusia han llegado a su fin y Vladimir Putin fue reelegido. Frente a este tipo de situación uno consideraría razonable felicitar su esfuerzo y dedicación en la campaña.
Presidente Putin celebrando su victoria
Pero… ¿cómo felicitar un suceso tan predecible como este? En los últimos años hemos presenciado elecciones altamente reñidas y con campañas en constante movimiento: desde Trump vs. Clinton hasta Macron vs. Le Pen. Entonces, ¿Qué pasó en estas elecciones rusas? ¿Por qué han ocurrido tan caletamente desapercibidas?
Teniendo solo ocho candidatos, pese a la libertad de nominación estipulada en la Constitución de la Federación Rusa de 1993, estas elecciones no mostraron preocupación alguna para el actual presidente Putin. Es más, como veremos, estas elecciones tuvieron desde candidatos en prisión hasta campañas basadas en que perderían las elecciones. A continuación, se dará una descripción de los highlights más importantes de este proceso.
Candidatos
Eliminando la competencia
Alexéi Navalni, líder del Partido Progresista de Rusia, mayor opositor del gobierno actual y creador de la Fundación Anticorrupción, anunció su intención de postularse a la presidencia en diciembre de 2016. Este posible candidato ya había recibido una anulación a su sentencia por fraude en 2013; pero, oh sorpresa, dos meses después de declarar su postulación, la corte de Leninsky decidió repetirla. Como resultado, Navalni tendría que cumplir con una condena de 5 años. Frente a esto, al ser el mayor representante de los opositores, sus seguidores respondieron realizando protestas que, como es de esperarse, no tuvieron éxito en liberarlo. En el ámbito internacional, el gobierno estadounidense y la Corte Europea de Derechos Humanos respondieron acusando ese hito de ser un movimiento político para sacar a Navalni del proceso electoral. Tal fue la magnitud de ese conflicto a nivel internacional que Vladimir Putin llegó al punto de acusar a la administración de Trump de intervencionista en sus procesos políticos.
Como es de esperarse, al momento de registro de los candidatos finales, Alexéi Navalni fue rechazado debido a su actual estado de presidiario. Al mismo tiempo, es curioso ver que de más de 70 personas que presentaron intención de postularse, y al menos 20 de ellos presentando efectivamente su registro, solo 8 fueran los candidatos oficiales (¿teoría de conspiración?).
Alexéi Navalny
Movimiento mediático
Lector, pese a que puedes estar pensando – o no – que estas elecciones no tuvieron tanta acogida en las noticias o medios sociales, dentro de Rusia la situación fue distinta. La idea de la reelección de Putin para un cuarto mandato (desde el año 2000) fue constantemente promovida por famosos de la región. Es más, uno de los mayores argumentos a favor que se presentó en los medios sociales fue aquel en contra de la “Rusofobia” occidental, el cual buscaba “limpiar” la imagen de Vladimir Putin creada por otros países. Un claro ejemplo de esta jugada fue la entrevista al famoso granjero Vasiliy Onishchenko por la revista Times. En esta entrevista él declaró que “uno tendría que ser ruso para entender por qué amamos a nuestro presidente”.
Sin embargo, otro grupo de la población rusa manifestó una constante crítica ante el Kremlin (o “gobierno” en rusowsky) de tener las elecciones “arregladas”. Este argumento se basaba en la falta de una oposición seria entre los candidatos y que, supuestamente, el gobierno había contratado a algunos candidatos para “seguir el juego”. Así pues, la candidata Ksenia Sobchak, a pocos meses del registro de candidatos, declaró su intención de postulación a través de un video en Youtube. En este, ella mencionó que se postularía a menos que se aceptara la candidatura de Alexéi Navalni. Con este movimiento en son de protesta, ella se autodenominó como la opción “ninguna de las anteriores”, cuyo propósito sería mostrar cuantos de los votantes veían estas elecciones como una farsa. Es más, su propia campaña se basó en la idea de que no ganaría, pero demostraría que hay siempre una oposición presente. No obstante, ella solo logró obtener el 1.67% de los votos, de acuerdo a la Comisión Electoral Central.
Como los internautas vieron las elecciones en Rusia
Pasos futuros
Si bien uno puede ver ciertos aspectos sospechosos en este tipo de elecciones, debemos tomar en cuenta el sesgo que se tiene sobre este contexto desde una perspectiva occidental. Es más, si bien para algunos puede significar la continuación de decisiones como fue la , donde se tomó territorio ucraniano en ese entonces (justificando la legitimidad rusa en la región). Para la población rusa puede que la continuidad de un gobierno signifique asegurar que sus obras sigan encaminándose. Si de algo podemos estar todos seguros, es que en la política internacional el futuro siempre es incierto y todo se verá en el siguiente episodio las próximas decisiones que tome tanto el gobierno de Rusia como sus países vecinos en respuesta.
