Si me dieran una moneda por cada persona que he visto fumar afuera de la universidad, podría tener suficiente dinero para comprar una fábrica de cigarrillos un auto nuevo.
Este hecho sorprendente y sad demuestra que fumar sigue siendo una práctica común a pesar de la publicidad informativa respecto a los daños y la famosa calavera presente en todos los paquetes vendidos formalmente #YoCreíQueEraDecorativa. Asimismo, como la teoría económica señala, las personas solo consumen bienes que le generan utilidad. Debido a eso, deberían evitar los llamados desbienes, aquellos que la reducen #EsoMeEnseñaronEnEco1.
Entonces, ¿Por qué, a pesar de saber todas las consecuencias de fumar en el cuerpo, existen personas que continúan haciéndolo? ¿Acaso no son racionales? ¿Existe alguna racionalidad en consumir un desbien? A través de un análisis intertemporal de costo – beneficio, se evaluará qué tan racional es la decisión de fumar, considerando la edad y vivencias pasadas de la persona. #TodoSeRelacionaEnEstaVida #SiNoSeRelacionaSeInventa.
Los cigarrillos tienen una característica muy peculiar: suelen ser susceptibles a generar adicción y dependencia debido a su alto contenido de nicotina. En el paper de Gary Becker y Kevin Murphy (1988), se presenta un análisis bastante interesante acerca de la decisión de fumar para una persona #Recomendadísimo. Para este se plantea una función de utilidad que depende principalmente de una variable llamada “gusto”, la cual se describe como el nivel de dependencia de un individuo hacia los cigarrillos.
Ut = U(St)
El “gusto” se deriva a partir de shocks emocionales y del consumo acumulado de cigarrillos #LaCostumbre. A partir de ellos, la variación del “gusto” por fumar se define como:
ΔSt = Ct – δSt – h(Dt)
El componente emocional es puro humo bastante empírico, ya que explica ciertos patrones de consumo. Ellos percibieron en distintas investigaciones que los fumadores primerizos parecen chimenea son los que más fuman, algo poco intuitivo y mal explicado por las teorías de consumo convencionales #NadaDeTeoríaDePrecios. No obstante, ellos muestran que ciertos shocks emocionales pueden afectar el nivel de consumo a través del “gusto” por fumar.
Un evento que crea inestabilidad emocional #AlgoSad aumenta el “gusto” por esta actividad, lo que conlleva a un incremento en la utilidad de fumar, a pesar de no haber consumido cigarrillos a lo largo de tu vida #100%RealNoFeik #Nieguenmelo. Asimismo, el impacto de estos shocks varía de acuerdo a la persona y el entorno en el que vive. De esta forma, explican el por qué los adolescentes son más propensos a fumar de forma frecuente, a pesar de haber consumido menos cigarrillos que un adulto fumador promedio a lo largo de su vida #YEsoQueNoTienenTantaPlata. Este razonamiento explica que los adolescentes se encuentran en una etapa de descontrol total inestabilidad y el impacto de un evento es más alto que en otra etapa de la vida #MásEmocionalesQueLosUchihas.
El segundo componente plantea que la utilidad de fumar incrementa mientras más consumas de este bien. De esta forma, se explica cómo las personas que han fumado con anterioridad tienden a seguir fumando en el presente #UnCicloSinFin(?). Asimismo, se plantea que un individuo pierde el gusto por el cigarrillo mientras más tiempo deje de fumar, debido a que se pierde la costumbre a hacerlo el stock de “gusto” disminuye a una tasa subjetiva llamada “memoria de consumo”.
Por otro lado, el costo de fumar es bien conocido actualmente por la sociedad #LaCalavera #TanTanTaaan. Los problemas relacionados con fumar involucran principalmente enfermedades respiratorias, pero estas no se desarrollan inmediatamente. Por lo tanto, la decisión de fumar involucra una decisión intertemporal, donde los costos conocidos son descontados a una tasa subjetiva de descuento intertemporal y comparados con el bienestar inmediato que da fumar a las personas.
La tasa de descuento subjetiva es la clave de nuestro análisis #AsAlways. Mientras más alta sea esta tasa, los costos interiorizados por el individuo son menores y existe una mayor propensión a fumar. Asimismo, esta tasa presenta variaciones a lo largo de la edad de las personas. Para los jóvenes, generalmente la tasa de descuento es alta debido a la excesiva importancia dada hacia el presente #EstamosTodosLocos #Yolo. Mientras uno envejece, la importancia del futuro incrementa hasta cierta edad, cuando cambia la tendencia hacia la baja debido a los pocos años posteriores que uno espera vivir #SeminarioStyle.
En conclusión, los fumadores no son necesariamente irracionales. Aunque no lo parezca, estos toman una decisión a partir de un minucioso análisis costo-beneficio. En el caso de los beneficios, tanto el consumo pasado como eventos sufridos en la vida impactan sobre la utilidad de fumar para un individuo. Paralelamente, esta utilidad de fumar es comparada con respecto a los costos futuros (enfermedades, etc) descontados por una tasa de descuento. Esta tasa, en el caso de los jóvenes, es bastante alta #Insensatos ya que “el futuro es percibido como lejano e incierto” #LoLeíEnUnaGalletaDeLaSuerte. De esta manera a pesar de no poder conseguir el auto entendí cómo funciona la racionalidad de un fumador.
Fuentes:
Becker, G., & Murphy, K. (1998). A Theory of Rational Addiction. The Journal of Political Economy. Recuperado de: “https://sites.duke.edu/econ206_01_s2011/files/2015/04/14_TeamGrossman_RationalAddiction.pdf”