La pandemia trajo consigo un sinnúmero de limitaciones que nos han afectado de diferentes maneras. Sin embargo, una de las industrias más afectadas ha sido la culinaria, desde los restaurantes más exclusivos, hasta los de comida rápida.
Estando en tal situación, algunas cadenas han optado por innovar su oferta de servicio a tal punto que están por cambiar todo lo que sabemos sobre los restaurantes tradicionales. Dicho de esta forma, es difícil imaginar un escenario así, por lo que es momento de presentar a uno de los más notorios impulsores de este cambio, para sorpresa de muchos: Taco Bell.
Esta cadena ha sido particularmente golpeada por los efectos de la pandemia. Tanto por la menor cantidad de clientes como por los costos excesivos de mobiliarios, alquileres y salarios. Esto empujó a la cadena a adoptar diversos cambios, desde la reducción de los espacios de cada nuevo restaurante, ahora con una orientación al servicio rápido y el delivery. De esta manera, se busca reducir el costo por un espacio menor, con menos espacios ineficientes – como las entrañables piscinas de pelotas que algunos disfrutamos de niños –, menos personal enfocado a labores poco productivas – como una limpieza exhaustiva – y un mayor espacio para tareas más necesarias para el flujo de su negocio – como un doble carril para órdenes para llevar. Podemos ver un ejemplo de esta clase de restaurantes en la siguiente imagen.
No obstante, lo que sí ha llamado la atención es el nuevo modelo de negocio planteado por un nuevo concepto de atención al cliente, mucho más eficiente, pero con una menor interacción personal. Este nuevo concepto toma en cuenta procedimientos 100% enfocados en la eficiencia, que solo toma en consideración las órdenes para llevar que se puedan preparar en un tiempo corto. Al aplicar este concepto, Taco Bell estaría recortando considerablemente sus costos por salarios, mantenimientos, servicios, tiempo, alquileres, entre muchos otros. Pues, sin clientes que dejen sobras tras de sí al terminar sus meriendas, los empleados pueden concentrarse solo en otras labores mucho más productivas; algo parecido sucede con los espacios, que ahora no necesariamente tienen que estar adecuados para un alto tránsito de personas, sino que estarán 100% enfocados en atención remota.
¿Y cómo se conseguiría esto? Pues se trata de un método dedicado exclusivamente al delivery, que dispensa cada orden mediante un elevador, directo a los vehículos de cada cliente. Además, se puede ver que este sistema tendría una clara sinergia con las aplicaciones de repartición, pues un mayor ritmo de producción conlleva a que se agilice cada entrega, además de considerar cada vez más entregas por repartidor.
Inclusive se menciona que esta clase de sistema se puede extender a figuras como los food courts, en los que varios restaurantes se alojan en un solo edificio – como el propuesto por Taco Bell – y distribuyen desde ahí toda clase de pedidos de manera ágil y eficiente. Siendo ello así, podríamos imaginarnos un mismo espacio que acoja a KFC, Burger King, Papa Johns’ o Popeyes que ofrezca el servicio de la manera más eficiente posible.
El concepto por ahora es netamente teórico y será aplicado poco a poco en el mediano plazo. Si bien esta nueva clase de restaurantes podría abrir una puerta – necesaria – en el sector de comida rápida, su uso se podría extender a otra clase de industrias, inclusive siendo considerada por empresas como Amazon para cumplir con sus entregas de la manera más costo-eficiente posible. Solo queda esperar y despedir oportunamente a esas piscinas de pelotas, que pronto solo vivirán en nuestros recuerdos.
¡BTW! Los chicos de The Game Theorists hicieron un video sobre estos en un de sus canales. Tienen toda la información necesaria para comprender el tema. Súper recomendado.
Edición: María Fernanda Tumbalobos