Hace unos días estaba revisando Facebook, cuando en eso me aparece un meme que decía: “Solos no podremos; pero juntos pasaremos todo – Un chico a su amigo en pleno examen de física”. Cuando vi la frase me quede pensando y recordé cuando escribí sobre el artículo de España y la situación que venía pasando. Todavía no se había elegido a un presidente y habían cuatro principales partidos que no se ponían de acuerdo: El Partido Popular (PP), el Partido Social Obrero Español (PSOE), Ciudadanos, y Unidos Podemos. Hoy, ya se puede afirmar que Rajoy será investido como presidente de España; pero ¿cómo logró este acontecimiento si el desacuerdo entre ellos era muy fuerte?
Al igual que en la Guerra, es claro que el PP no pudo resolver esto solo, necesitaron de alguien que los apoye o que no se pongan en su contra. Para los que no están al tanto de la situación española, he aquí un resumen: Rajoy se lanza para que el parlamento vote por él, pero el parlamento está representado por diversos partidos. Rajoy busca conversar con los líderes de los demás partidos pero no logra un apoyo suficiente. El líder del PSOE, Pedro Sánchez, se lanza y logra el apoyo de Ciudadanos, pero no le es suficiente para alcanzar la presidencia y por tanto las elecciones decidieron ser postergadas. Las nuevas elecciones fueron en Junio; sin embargo, volvieron a ser inconclusas y se pasó a realizar unas otras votaciones en Octubre.
En Julio, las conversaciones volvieron a darse. Una vez más Rajoy decide lanzarse a la investidura; pero con una condición: si el partido de Ciudadanos decide apoyarlos. Es así que el líder del PP decidió conversar con el partido de Ciudadanos para obtener su apoyo. Todo parecía que se volvía a repetir: Ciudadanos da la espalda y al final nadie saldría y volverían a tener otras votaciones. Iba a convertirse en una especie de ciclo; sin embargo, ocurre un hecho que marcaría el comienzo de un hecho histórico en la política española: Albert Rivero, líder del partido de Ciudadanos, decide apoyar a Rajoy, y esto genera la abstinencia del PSOE en las elecciones.
Ciudadanos ya tenía la guerra perdida. Sabía que nunca iba a logar la cantidad de votos necesaria para lograr la presidencia. En vez de buscar la presidencia, optó por utilizar la considerable cantidad de diputados en el parlamento para llegar a un acuerdo que le beneficie. Este partido ya había intentado apoyar al PSOE, pero no lograron obtener la cantidad suficiente de votos pues necesitaban los de Podemos, quienes estaban en contra del PP y del PSOE. Es así que Ciudadanos decide irse por la vieja confiable el PP. Con esto, lograron obtener la vicepresidencia del Congreso y un puesto en la secretaría.
Cuando Ciudadanos sabe que no tiene las de ganar (?)
El PSOE tenía las de perder. El principal opositor del PP no estaba dispuesto 
a apoyar la investidura de Rajoy, pero con el apoyo que tenían de Ciudadanos, tomaron en reconsideraron el “no” que tenían planeado. El Comité Federal del PSOE tendría solo hasta el fin de Octubre para reunirse y elegir la decisión que escogerán los diputados del parlamento. Cuando termina la reunión, se dio a conocer la elección: Abstenerse a Rajoy. Así es, el partido con quien se ha repartido a través de los años el parlamento el PP decidió no votar por el “no” en la investidura. Es importante saber que una vez escogida una decisión, los diputados no pueden tomar una elección que no sea esta; de hacerlo, se les abrirá un expediente.
Un hecho histórico había pasado, el principal opositor de décadas ha decidido abstenerse en la investidura, lo cual le daba el pase libre a Rajoy para que pueda ser elegido como presidente, situación que terminó ocurriendo. Mientras que para el PP todo parece ser felicidad, el PSOE está pasando por una situación crítica: Horas antes de las votaciones, Pedro Sánchez, líder de este partido, decide renunciar a su cargo en el parlamento y dejar el liderato de este partido. Esta drástica decisión la tomó debido a la diferencia entre pensamientos que tiene con el partido. Ahora, el futuro del PSOE parece ser incierto, todavía no se tiene a un representante. El 37.7% de los simpatizantes prefieren a Sánchez, pero es claro que no planea regresar mientras esta decisión sea la que se rija bajo el partido.
Imagínese que en el Perú, el partido de Veronika Mendoza decide apoyar a la candidatura de PPK, el fujimorismo no hace ninguna oposición y Keiko decida dejar el liderato. Es una situación política demasiado difícil para poder solucionarse a la mañana siguiente.
