“Tú renunciaste a tu corona por tu gente, ¿[Daenerys] haría lo mismo?” le preguntó Samwell Tarly a Jon Snow en el primer episodio de la octava temporada de Juego de Tronos. Polémica, transgresora, y revolucionaria, Daenerys genera diferentes reacciones en los personajes y la audiencia. El presente artículo pretende responder esta pregunta, analizando la evolución y las motivaciones de este personaje con el apoyo de los libros y la serie.
OJO: Este artículo va dirigido a los que están al día con Juego de Tronos. ¡Proceder con cuidado! Hay spoilers hasta el primer episodio de la octava temporada y de los cinco libros.
Al adaptar un libro a la pantalla es inevitable perder gran parte del mundo interno de los personajes, como sus pensamientos o recuerdos tempranos. La niñez de Daenerys, lamentablemente obviada en la serie, es crucial para entenderla. Creció exiliada, sin dinero, mendigando en las calles de Essos con su hermano Viserys, esperando que alguien quiera hospedar a los hermanos Targaryen. Al cumplir trece años, Viserys la vendió como esclava sexual a Khal Drogo, y su sufrimiento fue tan fuerte que consideró suicidarse. Como consecuencia, desde el momento que tuvo capacidad de decisión como Khaleesi, consideró como deber liberar de la esclavitud e injusticia a todos los que se crucen por su camino.
“¿Saben lo que se siente ser vendida?” –Daenerys en Juego de Tronos (Libro I)
Tal deseo de protección a los demás nace de la falta de protección que ella ha tenido. Incluso sus acciones lo demuestran: cuidaba a sus seguidores cuando morían a su lado en el desierto en Choque de Reyes, o alimentaba y curaba a los refugiados enfermos de Astapor cuando llegaron a las puertas de Meereen en Danza de Dragones.
“¿Para qué crean los dioses a reyes y reinas, si no es para proteger a quienes más lo necesitan?”
–Daenerys en Tormenta de Espadas (Libro III)“Tal vez no puedo lograr que mi gente sea buena, pero, aunque sea, debo intentar que sean un poquito menos malos.” –Daenerys en Danza de Dragones (Libro V)
En sentido ascendente, otra de sus mayores motivaciones es la de conseguir un hogar y una familia. Como creció en exilio, idealiza Westeros como el hogar que nunca tuvo.
“Todo lo que Daenerys quería de vuelta era la casa con la puerta roja, el árbol limonero fuera de su ventana, la niñez que nunca conoció.” –Daenerys en Juego de Tronos (Libro I)
“En su sueño habían sido marido y mujer, gente sencilla que vivía una vida sencilla en una casa alta de piedra con una puerta roja.” -Daenerys en Danza de Dragones (Libro V)
Examinemos sus pensamientos. En los capítulos de la saga narrados desde su punto de vista, la palabra “trono” se menciona 46 veces (incluidas las veces en las que Viserys o cualquier otra persona lo menciona); mientras que “mi gente”, “la gente común”, y “su gente” se mencionan 72 veces en total; “hogar”, 68; y “amor”, 128. Podemos entonces inferir que esta adolescente que creció sin familia ni amor los ansía mucho más que cualquier trono. Como le dijo a Jon frente a las cataratas: “Nos podríamos quedar aquí mil años.” Creo indudablemente que quedarse juntos y alejados del poder es un deseo genuino de ambos.
Además, ella nunca ha tenido un solo pensamiento sobre gloria o riqueza. Su insistencia sobre su derecho al trono se debe al sentimiento de deber de estar en él, no solo para ayudar a los vulnerables; sino también, al ser aparentemente la última Targaryen, pesa en sus hombros la responsabilidad de reivindicar su apellido, tan manchado por su padre.
A fin de cuentas, ella ve el trono como un medio para ayudar a los demás. Pero, ¿qué tanto lo desea?
“Estaba exhausta, Jorah. Estaba cansada de la guerra. Quería descansar, reír, plantar árboles y verlos crecer. Solo soy una niña.” -Daenerys en Danza de Dragones (Libro V)
Al llegar a Dragonstone no se sienta en el trono. Solo lo mira con preocupación y pasa de largo a la sala de reuniones para comenzar con su deber de gobernar. Parece que el trono le daba una razón para vivir, pero una vez que probó el poder, se dio cuenta de que no era lo que en realidad quería.
Con todo esto en mente, recordemos la pregunta de Sam: “Tú renunciaste a tu corona por tu gente, ¿ella haría lo mismo?”
Ya lo ha hecho innumerables veces, Sam. Por su gente, Danerys ha sacrificado desde su cuerpo hasta Westeros. Se casó con Hizdahr Zo Loraq en el quinto libro—a pesar de querer casarse con Daario—para lograr instaurar la paz en Meereen y mantener así a la gente a salvo. ¿Y qué otro conquistador con tres dragones intentaría gobernar diplomáticamente hasta el punto de encerrarlos para proteger a la gente? Ser reina es un trabajo servil para Daenerys—tiene que poner sus deseos de lado. Como le dijo Daario: “Eres la única persona en Meereen que no es libre.” Su trama entera ha consistido en sacrificios. Si tuviera sed de poder, ¿hubiera pospuesto el viaje a Westeros, “su hogar”, por años para salvar a la gente de Essos?
“Hubiera preferido flotar en una piscina perfumada todo el día, comiendo frutas y soñando con la casa de la puerta roja, pero una reina le pertenece a su gente, no a sí misma.” –Daenerys en Danza de Dragones (Libro V)
Incluso en Westeros, sus sacrificios continúan. A pesar de tener una gran ventaja frente a Cersei, no toma el trono. Salva a Jon Snow de los Caminantes Blancos y le promete luchar por el Norte sin esperar nada a cambio, a pesar de que él no haya hincado la rodilla. Él la hinca después, como señal de agradecimiento, al atestiguar su desinterés—razón por la que también se enamora de ella. Finalmente, para terminar mi respuesta a Sam, la simple presencia de Daenerys en el Norte apoyando la causa contra los Caminantes Blancos es suficiente prueba de que sacrifica la corona por su gente.
Otra pregunta para reflexionar: si la motivación de Daenerys para perseguir el trono de Westeros fuera egoísta, ¿por qué miles de personas de Essos luchan por ella?
Finalmente, si Westeros no tiene una economía basada en la esclavitud como la Bahía de Esclavos, ¿qué planea hacer en su gobierno?
“Lannister, Targaryen, Baratheon, Stark, Tyrell son simplemente rayos en una rueda. Uno está encima, luego otro y otro y otro, aplastando a los que están en el suelo. […] Voy a romper la rueda.” –Daenerys en Juego de Tronos (serie)
En este caso, el corazón sigue siendo la gente. La monarquía absoluta con un método de sucesión hereditario ha llegado a ser un sistema político defectuoso: se crean guerras civiles por el derecho al trono y miles mueren luchando por la búsqueda de poder de los nobles. Daenerys busca ponerle un fin a este sistema ya que solo crea más guerra y miseria. No puedo asegurar que instaurará una democracia—Martin sabe lo suficiente de historia universal como para saber que la transición de una monarquía absoluta a una democracia es lenta y engorrosa—pero podría instaurar un concilio regente, por ejemplo, y un método de sucesión distinto para que el siguiente gobernante sea el más capaz, en vez de solamente el hijo (varón) del anterior.
“No te conocen”, Jon le dijo a Daenerys después de las críticas que recibió de los norteños. Espero que este artículo les haya ayudado a conocer un poco mejor a Daenerys Targaryen.
Editado por: Daniela Cáceres
Fuentes:
Martin, George R. R. (1996). Juego de Tronos. Buenos Aires: Plaza Janés.
Martin, George R. R. (2000) Tormenta de Espadas. Buenos Aires: Plaza Janés.
Martin, George R. R. (2011) Danza de Dragones. Buenos Aires: Plaza Janés.
Contabilidad de palabras: http://mhysaofdragons.tumblr.com