Acabamos de sobrevivir una tempestad en tiempo récord: desde la petición de una segunda moción de vacancia, pasando por los kenjivideos y la renuncia del presidente de lujo (¿?), hasta que Vizcarra llegó para asumir la presidencia. Pero seamos sinceros: la tormenta empezó desde el momento en el cual Keiko Fujimori se paró en un macetero para poner su mejor pocker face ante su derrota, como si se tratase de una vil metáfora.
Poco después entenderíamos la metáfora: el macetero representaba el futuro gobierno de PPK.
Los últimos diez días pudimos entretenernos (?) compartiendo por nuestras redes sociales todo meme o parodia de la situación política coyuntural, porque nuestra siguiente opción era llorar. Pero como diría nuestro ahora ex presidente, se acabó el recreo pues la vida real, más allá de la política, continúa. Esto significa que aún tenemos una larga lista de asuntos que atender por el gobierno, algunos de los cuales son:
Para no repetir la historia de Pisco: La Reconstrucción con Cambios
Actualmente, las únicas noticias al respecto son sobre el descontento de la población por la supuesta inacción del Estado. Puede que estas obras tan importantes para las regiones damnificadas norteñas fueran rezagadas por el constante sismo político de los últimos meses. Pero ya pasó un año desde el Fenómeno del Niño Costero y el tiempo apremia, pues estudios australianos indican una alta probabilidad de fenómenos del niño más frecuentes y más intensos en los próximos años .
Lo prioritario a este respecto es la implementación de la infraestructura de prevención ante desastres (canalización de ríos, reservorios de lluvia que evitan huaycos, reforestación de terrenos empinados, etc.), y no la reconstrucción de viviendas y carreteras con mero trasfondo populista.
Río Mapocho: muros de contención, rejillas para contener caudal anómalo y vegetación en vez de casas a sus orillas. Y como diría la ilustre congresista Vilcatoma: ES CHILENO.
Recomendación amigable: para evitar que la impopularidad por la supuesta inacción en este campo arruine la luna de miel de Vizcarra, probablemente sea ventajoso invertir modestamente en publicidad estatal que explique la diferencia entre obras de prevención y obras de reconstrucción.
La de siempre: Educación
Respecto al sector educación, ya hemos visto a Vizcarra en visitas inopinadas a colegios estatales. Si bien esto da indicios positivos de su preocupación en torno a este importante, pero abandonado sector, lo cierto es que se necesitan más que buenas intenciones.
Una vez que Idel Vexler dejó la cartera, se hicieron conocidos dos hechos: trabajó más en despedir a todos los directores de áreas estratégicas del Minedu que en tener abastecidos de libros a los colegios para este año escolar que ya empezó.
El sector Educación necesita una política de Estado. Necesitamos un Saavedra de vuelta: un visionario que tenga más propuestas constructivas y no discrepancias políticas que retrocedan lo ya avanzado. Finalmente, la mala gestión en el Minedu afecta la calidad educativa, y por lo tanto, el futuro de millones de niños en todos los rincones de nuestro país
El enemigo “silencioso”: La congestión vehicular en las ciudades
¿Sabías que la congestión vehicular cuesta anualmente el equivalente al 4% del PBI? Además, está demostrado que el tráfico intenso afecta negativamente la calidad de vida de los habitantes, baja su productividad e incrementa la probabilidad de accidentes y muerte .
Mejorar el tráfico involucra aspectos tan costosos como infraestructura, y tan profundos como cultura vial y educación. Sin embargo, su tratamiento es fundamental para ayudar a una sociedad a superarse económica y socialmente.
Intentos de los gobiernos regionales y municipales por transformar el transporte y reducir el caos vial no han sido efectivos, por decir lo menos. En enero se aprobó la creación de la Autoridad Única de Transporte para Lima y Callao. ¿Ahora el gobierno estatal podrá superar la pésima gestión del tráfico que hicieron los gobiernos regionales y municipales?
Recomendación: aprender de otros y emplear personas competentes para los proyectos destinados a mejorar el tráfico. Ciudades más pobladas como México DF han logrado manejar el tráfico mejor que nosotros. Pero no podemos aspirar a seguir sus pasos con “ingenieros” que califican puentes caídos como “desplomados”.
Hablando de competencia… La próxima vez que quieras molestar a tu amigo arquitecto, muéstrale esto.
El gobierno de Vizcarra
El “sismo” ya pasó. Ahora, los problemas que aquejan a los ciudadanos de a pie, a los peruanos de zonas rurales, a las poblaciones vulnerables y en general a todos los que solo fuimos ansiosos espectadores de la última puesta en escena política, necesitan ser abordados responsable y organizadamente.
Vizcarra tiene a su favor una reputación envidiable: fue gobernador regional de Moquegua, y tres años después de su gestión, dicha región superó el promedio nacional económico, laboral, educativo, de salud e infraestructura , posicionándose en el primer lugar en el índice de progreso social regional. Otro punto a su favor es que está más cerca del peruano “promedio” por su experiencia y por su origen.
Esperamos que, por el bienestar de todos, dicha efectividad pasada inspire su actual gobierno. Desde aquí le deseamos éxito y fuerza política en sus labores. Su éxito será nuestro éxito.
