Si bien el nombre puede confundir, este no es un artículo sobre el horóscopo chino, pero tiene que ver. Desde los noventas, el ámbito político internacional ha logrado superar la Guerra Fría, pero no la lucha de ideologías. Un claro ejemplo de esto fue el surgimiento de un nuevo poder internacional, que para algunos fue muy sorpresivo mientras que otros se les antojo el chifa si lo vieron venir: China. El tigre asiático decidió cambiar la visión de lo que era su economía y, evitando los errores de la Unión Soviética, decidió abrir sus fronteras y mercados al resto del mundo. El aspecto económico no lo entiendo fue revolucionario pues estableció un cambio del régimen socialista bajo un nuevo nombre, la economía de mercado socialista. Instaurada por reformas que empezaron en 1978 por Den Xiaoping, generaron que China, hoy en día, se volviera el rival más poderoso de Estados Unidos por la posición de poder hegemónico global.
En la última década, la principal desventaja que tenía China era que EE.UU. seguía protegiendo fervientemente sus intereses en el extranjero, especialmente bajo la administración de Barack Obama. Uno de los primeros conflictos en los que China demostró ser un fuerte competidor fue con la disputa del mar del sureste asiático, cuya traducción literal del inglés al español sería el mar del sureste chino. Japón enfrentó la pretensión de China de establecer su soberanía; sin embargo, en una inspección de la Organización de Estados Unidos y sus Amigos las Naciones Unidas, se declaró que las islas que estaban posicionadas en el mar habían sido artificialmente construidas por China. La discusión era más complicada, ya no sólo era Jaden Smith vs Ralph Macchio, y la equivocada definición de Karate y Kung Fu (si no has visto Karate Kid, anda ahora).
Pero todo cambió cuando la nación del fuego atacó cuando en las últimas elecciones de Estados Unidos, lo golpearon en la cabeza y tuvo un cambio de personalidad tan espectacular como PPK negociando con Kenji Fujimori. Donald Trump, el presidente que cree que gobernar es un reality show, ganó con un discurso que describía cómo la comunidad internacional se había aprovechado de EE.UU., básicamente, América para los americanos #AmericaEsUnContinente. Esto generó un vacío de negociación política que China ha ido aprovechando poco a poco. Esto es algo que se ha visto menos en los lugares más cercanos a EEUU, como Latinoamérica, pero que incluso acá se ha podido ver. No es un secreto que Perú está entablando más relaciones económicas con el dragón que con el águila, a pesar de que nuestro ex presidente tenía su pasaporte gringo.
Este cambio de política no solo genera un cambio en las relaciones económicas mundiales, también afecta a algo más importante, el fútbol… digo, las relaciones políticas (Oscar pasó del Chelsea a la Liga China, no lo supero). El hecho de que EEUU esté regresando a su visión política de comienzos del siglo XX, significa que pierde la oportunidad de expandir la ideología política capitalista. Esto no significa que los alumnos de la PUCP pueden saltar de emoción, pero incluye el hecho que el nuevo líder en influencia política en el mundo, ya no es una democracia, pero un autoritarismo tan claro como los Fujimoris son corruptos.
Mucho de estos cambios se deben a los perfiles que presentan los dos líderes de estos países. Como se sabe, Trump no ganó el voto popular en las elecciones y mucho de sus logros se basan en mentiras un discurso demagogo que no genera confianza. Los analistas políticos, esas “basuras liberales”, explican que mucho del crecimiento que tuvo EEUU el año pasado fue por causa de una inercia de las políticas instauradas durante la administración de Obama. Por el otro lado, el Presidente de la República Popular de China es un ávido político que escaló desde una posición muy baja dentro del Partido Comunista de China hasta ser denominado como el “Nuevo Mao”. Sus estrategias políticas han logrado que China tenga un resurgimiento en su economía (es increíble pensar que a pesar de haberse desacelerado, igual crecía más que las siguientes tres economías más grandes juntas). Su ascenso maquiavélico ha resultado en un cambio constitucional que eliminaría el límite de dos reelecciones para poder lanzarse de nuevo como presidente el 2023. Solo queda claro que en una negociación entre estos dos personajes, solo hay uno que está realmente preparado.
Si te interesas por la onda del águila también sería interesante que fijases tu atención en la onda del mago, porque es su onda asociada, la onda donde están los ocultos de l otra. Y eso completa el sentido. La onda del águila transcurre simultáneamente a la onda del mago, solo que en sentido inverso. Tú vas en una dirección, que es lo que expresa la onda del águila, es decir, en sentido fluyente, y al mismo tiempo estás recibiendo unas ayudas desde la dimensión de tus guías, en sentido retrógrado, y en este caso desde la onda del mago. La onda del águila es ver la maravilla, porque termina viendo la maravilla que expresa la onda de la estrella, de la armonía, de la belleza. Y eso es porque en su interior tiene toda la actitud emocional que expresa el mago. El mago conoce la realidad más allá de la apariencia, de tal manera que ver la maravilla también es ver la realidad más allá de la apariencia, que siempre es una realidad maravillosa. Cuando tú logras ver esto, tú águila está arriba volando y tu mago está despierto. El final de la onda del águila es la mano. De esta manera vemos que ver la maravilla, mirar como el águila, como ese mago despierto, es también un mago sanador en forma transcendente.