La Física suele ser vista como una ciencia un tanto predecible y aburrida. Pero, de vez en cuando aparecen nuevas teorías que van contra el sentido común y que, de ser ciertas, cambiarían totalmente la forma en la que comprendemos el universo. Es con esta definición que les voy a presentar las teorías de la Física más voladas de hoy en día. Por supuesto, todas estas teorías tienen cierta presencia en la comunidad científica actual, aunque algunas con mayor validez que otra.
Sin más preámbulos, comencemos.
Universos Paralelos
Una de las bases de muchas historias de ciencia ficción, la existencia de las dimensiones alternas, surgió como una real posibilidad a raíz de la observación del mundo cuántico –bosones, leptones, cuarks y sus interacciones con el mundo- y el descubrimiento de la aparente aleatoriedad de su comportamiento. Esto es, parece que las partículas que existen en el plano cuántico no siguen un comportamiento predecible o, en los términos más sencillos que se me ocurren, hacen lo que les da la gana sin importar qué haya pasado antes.
Debido a que el comportamiento del mundo cuántico es seleccionado al azar, solo podemos intentar predecir lo que pasará a través de modelos estadísticos. Pero, ¿por qué las partículas cuánticas se comportan de tal manera ciertas veces y otras no? Pues, los científicos del mundo no tienen idea del mecanismo, pero se cree que las partículas siempre se comportan igual. O sea, cada vez que, supongamos, un electrón tiene un 50 por ciento de probabilidades de ir arriba o abajo, se crean dos universos exactamente igual, salvo que en uno el electrón se va arriba y en el otro, abajo. De esta manera, no es que las partículas tengan que escoger un camino, si no que siempre escogen todos los caminos y nosotros solo vemos uno.
¿En algún universo ella me hará caso?
Es a partir de esta interpretación del mundo cuántico que nació la idea de que en otro universo esa flaca te dijo que sí, que en una dimensión alterna te ganaste la Tinka o que en un mundo paralelo no tuviste que biquear ese curso.
Vivimos en una Simulación
El avance exponencial de la informática es algo con lo cual nos hemos acostumbrado a vivir -¿recuerdan que hasta hace algunos años 50Kbps era la mayor velocidad de internet que uno podría desear?- y que podemos tomar como un hecho. Si esta tendencia sigue ininterrumpida, algún día tendremos la capacidad tecnológica para replicar la conciencia humana y, después de no tanto tiempo, podremos hacer una simulación de un universo para esas conciencias artificiales. De lograr eso, las mentes dentro de esta simulación no tendrían idea de que su existencia es tan solo un juego de Sims para nosotros.
Neymar Jr. es uno de los principales voceros de esta teoría.
Bueno, pero, ¿no sería posible que nosotros seamos esos personajes artificiales de una civilización mucho más avanzada que nosotros? De hecho, si nos ponemos a pensar en ello, lo más probable es que esto haya pasado -y más de una vez. Con esto quiero decir que, si nosotros somos una simulación y con el progreso de la tecnología podremos crear nuestras propias simulaciones del universo, es lógico pensar que nuestras simulaciones algún día llegarían al mismo punto y, así, podríamos deducir que nuestros creadores fueron creados por simulaciones y así sucesivamente.
Si esta teoría es cierta (como aseguran varias figuras de la comunidad científica), es casi seguro que no podamos probarla, pues los seres que iniciaron la simulación muy probablemente han puesto límites a nuestras leyes físicas para lograrlo -piensa en las paredes inc¿visibles que se ponen en los bordes de los mapas de los videojuegos.
El Universo es un Holograma
Comúnmente malinterpretado como una variación de la teoría anterior, el principio holográfico dice que que la información de un objeto puede ser obtenida solo de su superficie y que el volumen es una ilusión. El nombre sale de los hologramas tipo Leia en la primera película de Star Wars (digo primera porque la 1, 2 y 3 no existen en mi realidad), que muestran una imagen que parece tridimensional, pero que solo es una superficie, como el cascarón de una verdadera representación tridimensional.
Bill Cipher decía la verdad todo este tiempo. No se olviden de comprar oro!
Si bien esta teoría no afectaría en lo absoluto a nuestra vida cotidiana, sus implicaciones en el estudio del universo serían masivas, pues podría ser la clave para el desarrollo de una teoría del todo y simplificaría el estudio de los cuerpos masivos [debo resistir hacer chistes sobre tu madre].
Retrocausalidad
Ahora hablaremos de una teoría que me ha fascinado desde que la escuché por primera vez cuando tenía alrededor de 15 años (chibolo pavo): el futuro puede impactar el presente. Lo más impactante de este postulado es que explicaría varios fenómenos del mundo cuántico -otra vez con eso- y tenemos evidencia de que ocurre.
Muy bien, la gente no suele entenderme del todo cuando les explico esto, así que ténganme paciencia.
¿Recuerdan cuando les dije que las partículas subatómicas (primera teoría) se comportan de maneras aparentemente aleatorias? Pues, tal vez sea que la forma en las que medimos sus comportamientos la que afecte a esas mismas mediciones. Pero varios experimentos miden solo lo que ocurrió antes de la medición, así que no podrían causar algún efecto en lo que pasó antes, ¿o sí? :0
Cuando le conté a mi gran amigo Owen sobre esta teoría, me dijo estas sabias palabras.
Lo sé, pareciera que esto sólo es una hipótesis sin fundamentos, pero les digo que sí hay hechos que parecen probar la retrocausalidad-osugerir su existencia, por lo menos. Esto puede verse con los fotones, los cuales se comportan como partículas y como ondas, según el entendimiento actual. Con el experimento de la doble rendija mandamos a un solo fotón a un camino con dos salidas que se juntan después, pudiendo pasar solo por uno. Sin embargo, al observar la trayectoria que sigue el fotón, pareciera que algo más estuviera interfiriendo su camino, como si el fotón estuviera pasando por las dos salidas a la vez y chocar consigo mismo. Pero, ¿cómo es posible esto? Le retrocausalidad propone que el fotón escoge un solo camino a seguir, pero se crea una curva temporal cerrada, pudiendo interactuar con su “yo” del pasado y cambiando su propia trayectoria.
¿Se imaginan lo que podríamos lograr si es que esta teoría fuera correcta? Algunos creen que podríamos enviar mensajes al pasado para poder prevenir catástrofes o hasta viajar en el tiempo. Pero no se suele ver a la retrocausalidad como algo muy científico en estos días, pues se han podido explicar, a través de otras teorías, varios de los fenómenos que la requerían.
Conciencia Universal
Por último, les presento la teoría más volada, con mayor impacto y, de lejos, la considerada menos seria de todas: el universo es consciente y nosotros somos manifestaciones de su conciencia.
[Tomen cada vez que diga “conciencia”]
Si bien muy pocos científicos siquiera contemplan la veracidad de esta teoría, yo estoy aquí para que me lean, no para probar cosas. Así que les explicaré en qué consiste.
La “teoría” de la conciencia universal se formó por la filosofía. Tras preguntarse por qué nosotros somos conscientes si estamos compuestos de partes que carecen de conciencia, algunos filósofos postularon que toda partícula tiene cierto nivel de conciencia y que éstas se suman entre ellas, formando conciencias de niveles superiores. Es por ello que nosotros seríamos concientes, pues estamos formados de conciencias inferiores que no consideramos suficientemente concientes.
Según la teoría de la conciencia universal, básicamente el cosmos tiene personalidad múltiple
Entonces, si continuamos con la lógica de la acumulación de conciencias, la única conclusión es que nosotros somos tan sólo unas pequeñas formas de conciencia inferiores dentro de la inconcebible conciencia que tendría el universo.
Conclusión (?)
A veces podemos creer que la vida es una locura, pero algunos científicos lo llevan al extremo.
