¿Has buscado alguna vez medios para financiar un negocio? ¿Has visto la cantidad diferente de tasas que hay para el mismo monto? Fintech te ayuda a buscar de entre todos los métodos de financiamiento cuál sería el más adecuado para tus finanzas. En vez de perder tiempo y dinero aceptando las tasas bancarias, FinTech te lo hace fácil para que encuentres tu servicio ideal al mejor precio. ¿Finanzas? Fintech.
No es un secreto para nadie que una visita al banco en el Perú es una experiencia poco placentera que solo sirve para consumir tiempo útil y conseguir un bronceado excepcional. Más allá de esto, ir al banco para hacer transacciones que involucran grandes sumas de dinero se ha vuelto una actividad relativamente riesgosa en los últimos años, sobre todo en la región latinoamericana. Pensémoslo un momento, nada más para conseguir un crédito bancario se necesita emplear por los menos un par de horas en el viaje hacia el banco, esperar en la línea y llevar a cabo a operación en sí. Eso sin contar todos los costos que comprende el reunir todos los documentos necesarios. Muy aparte de esto, es importante considerar cuán injusta puede llegar a ser la relación Banco-Cliente, una prueba de esto serían las ridículamente bajas tasas de interés por nuestros ahorros o las altas comisiones por retiros en ciertos lugares. Sí, se desperdicia el tiempo, por qué no decirlo; y siempre se ha tomado como un tema totalmente claudicado, que no se puede cambiar. Sin embargo, ya en otras regiones del mundo, ha surgido una solución con muchísimo potencial. Con ustedes: FinTech.
FinTech se define – muy ampliamente – como la amalgama entre las innovaciones tecnológicas y la prestación de servicios financieros (léase pagos digitales, financiamiento o intercambios de valores y un gran etcétera). Estos servicios, desarrollados en un comienzo por las firmas del NASDAQ100, ya han sido ampliamente aprovechados en varios países desarrollados en todo el mundo. A tal punto llega este aprovechamiento de la tecnología que, en muchas plataformas de servicios digitales de hoy en día como Spotify, Netflix o Steam, todas las transacciones son digitales. Es decir, necesitas asimilar estos métodos si quieres acceder al servicio.
Pensémoslo un momento, el banco tradicional es una institución inclusive más antigua que el dinero mismo, por lo que no extraña que un cambio en la forma en la que manejamos nuestro dinero sea una iniciativa bastante difícil de promover en estos días. La idea en sí es que hoy en día las apps ya no se limitan solo a hacer pagos y atrapar pokemones comprar/vender, y es que en un mundo donde estos nuevos emprendimientos son solo el comienzo de una movida más grande, es necesario aprender cómo funcionan y comprender sus beneficios lo más pronto posible. Veamos, pues, algunas de ellas.
La más asequible e incipientemente adoptada en nuestro país es la del crowd-funding, en donde uno puede captar fondos de distintas personas (casi siempre naturales) para invertir en una idea de negocio, el líder indiscutible en este campo sería Kickstarter. Hoy, también, ya existe banca que está al servicio del usuario en varios países, desde el celular de uno y genera utilidades tan o más grandes que las de un banco pequeño en un país pequeño, como las americanas Paypal, Stripe, la británica Atom Bank o las pertenecientes al holding chino Tencent. Es más, estas firmas – sobresale la china WeChat – han llegado a ampliar el servicio a tal punto de ofrecer inclusive créditos universitarios (aquí ha Amazon propone interesantes inciativas), pasajes aéreos, citas médicas y un muy largo etcétera. Todo se puede transar con la seguridad del escáner biométrico, por una mínima comisión y desde tu celular. Muchos auguran que, con un servicio como este, los bancos del futuro no serán manejados por las grandes corporaciones que los lideran hoy, sino por cualquiera que sea capaz de ofrecer un servicio de confianza y calidad.
Pero tampoco es como si en el Perú todos sigamos guardando nuestra plata bajo el colchón. Mucho se ha hecho por mejorar los servicios financieros y aumentar su llegada. Muestras de esto son las aplicaciones móviles de los bancos más grandes del país, que permiten hacer transacciones mediante tu smartphone. Vamos por buen camino, sí. Sin embargo, el asunto subyacente sigue ahí: la falta de cultura financiera, la cual nos pesa mucho desde hace tiempo y nos pone en desventaja con respecto a los vecinos de la región. Lo bueno es que el cambio llegará eventualmente, aunque tal vez nos choque al comienzo. Como se dice por ahí, serán sustos que dan gusto.
PD 1. ¿Tencent? Yo escuché ese nombre antes. <http://www.vozactual.com/semillas-de-sesamo/>
PD 2. Casi todo el material aquí expuesto lo obtuve del siguiente TEDx. Sumamente recomendado. <https://www.youtube.com/watch?v=pPkNtN8G7q8>
PD 2. Créditos a Rodrigo Torres por la idea.