Con el fin del 2017 se cierra un año de sorpresas que impactaron al mundo y al Perú. En solo un año, la constante provocación entre EE.UU. y Corea del Norte tuvo al mundo cerca de una guerra nuclear, el Reino Unido inició su salida formal de la Unión Europea, Alianza salió campeón, Perú clasificó para el mundial e indultaron a Fujimori. Pero, viendo en retrospectiva, el año también trajo oportunidades de inversión, lo que hace que uno se pregunte a sí mismo “¿y si hubiera…?”. Así pues, estimado inversionista frustrado, haremos un análisis de aquello que habríamos podido aprovechar si hubiésemos sido clarividentes.
Bitcoin y el alza de las criptomonedas
Con la creación del Bitcoin nació una tendencia hacia lo que se conocería como criptomonedas. Sin embargo, el valor de estas en sus inicios no era lo que es ahora. Pensar que en 2011 una persona pagó una pizza con 19 bitcoins . Hoy valorizados en más de US$ 300,000 suena ridículo. Pero, ¿qué indicios debimos haber notado? Los inversores de China y Corea del Sur apostaron fuertemente por este sistema. Así también, cual “efecto dominó” se tuvo a otras criptomonedas beneficiadas: Ethereum, Litecoin, etc. Los resultados fueron altamente notables: El valor del Bitcoin, la más conocida, incrementó de US$950 a US$16,620 durante el año. No obstante, esta moneda demostró la continuidad de su volatilidad al caer en Navidad y remontarse nuevamente poco después. Ahora, puede haber sido el trade del año, pero eso no significa que uno deba apostar el 100% a las criptomonedas sin pensarlo bien primero (te hablo a ti, Maduro).
El “Enigma Network” y los beneficios de vender a tiempo.
Cuando los Tres Mosqueteros decían su famosa frase “Todos para uno y uno para todos”, uno no esperaba aplicarla a las inversiones entre empresas. Pero, cuando David Webb publicó su reporte con un nombre de película “The Enigma Network: 50 stocks not to own” demostró cómo en el Hong Kong Stock Exchange (HKSE) se había formado una telaraña de propiedad de acciones que sobrevaloraban las empresas a niveles inimaginables. Es así como, menos de una semana después, el valor de las acciones de empresas como China Jicheng Holdings Ltd. y GreaterChina Professional Services Ltd. cayó en casi 90%. Esto demostró la alta volatilidad del HKSE y su poco nivel de investigación para la protección del inversionista (crítica mencionada por David Webb desde el 2008). Entonces, estimado lector, ¿quiénes fueron los afortunados? La respuesta, por más obvia que suene, es que fueron aquellos que vendieron a tiempo y que ganaron 10 veces más del valor final de la acción.
El salto económico portugués
Antes que nada recordemos la crisis económica europea. Durante esos años vimos a los países de dicho continente caer uno a uno (cual dominós) y recibir fondos de rescate internacional. En el caso de Portugal, desde que recibieron €78 billones del Fondo Monetario Internacional y de la Unión Europea, fue considerada la segunda economía más débil del continente –poco después de Grecia–. Este último año, S&P – una agencia de calificación de inversiones – ascendió al país ibérico en su grado de inversión, lo cual hizo más atractivo dicho mercado. Es así como el yield de sus bonos soberanos bajó 235 puntos básicos desde el inicio del año y generó mayor demanda y ganancias para los inversionistas.
Perú no se queda atrás
Ahora, ¿qué oportunidades tuvimos en el Perú? Si bien uno a veces piensa que “hay que ver lo bueno durante la adversidad”, los resultados que trajo el Fenómeno del Niño consigo tuvieron un visible efecto en las acciones de ciertas compañías. Una de ellas, Cementos Pacasmayo, aumentó el precio de sus acciones en la Bolsa de NY en más de 25% entre fines de febrero y fines de marzo. A partir de eso, a un menor ritmo, ha continuado el alza hasta la actualidad. Otro éxito fue el caso de Volcan cuando Glencore anunció su interés por la compra de sus acciones con voto. En una semana el precio de sus acciones aumentó en casi 50%. Esto continuó a lo largo de octubre y logró que finalmente aumente su valor en casi 70% al precio previo al anuncio. Lamentablemente, toda historia tiene su fin y, en este caso, fue después de que se realizara la compra por Glencore.
Es así que llegamos al final de este listado de inversiones exitosas de las cuales pudimos ser parte. Pero, qué fácil resulta pensar en todo lo que uno pudo haber logrado una vez que ha pasado. Claramente, la vida real no es así. Si tuviéramos dicha capacidad de clarividencia… ¿no serían aburridas las inversiones? ¿ganar todo el tiempo y no tener que esforzarte para invertir correctamente? Desde mi humilde punto de vista, creo que debemos pasar la página y prepararnos para lo que nos traerá este 2018. Y tú, estimado inversionista frustrado, es posible que finalmente puedas tomar ese salto de fe este año e invertir. Y – ¿quién sabe? – de repente consigues anticipar el trade del año.