Hace dos semanas inició un nuevo ciclo en la universidad y seguramente ya estás prometiendo dedicarte a solo estudiar y ser el nuevo Maes #ComoSiEsasCosasPasaran. Probablemente has renunciado a las juergas, las distracciones de diez minutos que se vuelven horas y has decidido cerrarle las puertas al amor. A pesar de ello, ¿sientes en el fondo de tu negro corazón que no es necesario cerrar ninguna puerta, pues no se te acercan ni las moscas?, ¿acaso no eres tan guapo como te dice tu tía? Hoy en VA te traemos la respuesta de por qué no consigues pareja ni agarre.
Si lo primero que viene a tu mente es que no eres atractivo físicamente, quizá necesites conocer más acerca del “Efecto aureola”. En 1920, el profesor y psicólogo Edward Lee Thorndike realizó un experimento en el que pidió a los oficiales que calificaran a los soldados a su mando. Thorndike observó que, en su mayoría, los hombres eran calificados como santos o diablos, es decir, con comportamiento totalmente bueno o totalmente malo, a pesar de no contar con la información suficiente sobre el evaluado. En la actualidad, este sesgo puede aplicarse a cualquier ámbito de nuestra vida profesional, familiar y personal.
El efecto halo o aureola podría definirse como una tendencia cognitiva que lleva a las personas a generalizar en base a la percepción de un rasgo particular. Por ejemplo, si un elemento es positivo, el conjunto al que pertenece el elemento es apreciado como positivo; de lo contrario, si es negativo, la visión del conjunto también lo será. Si se pudiera resumir ello en una frase, esta sería: La primera impresión es lo que cuenta.
Este sesgo cognitivo ha sido muy bien aprovechado por numerosas empresas #M@lditoCapitalismo. En 2015 se publicó el artículo Crime, Punishment and the Halo Effect of Corporate Social Responsibility, en el cual se exponían las posibles consecuencias de este efecto sobre la percepción de una empresa. Si la empresa seleccionara algunas prácticas que generen sensibilidad en el público y las empleara en su estrategia de comunicación #PuroMarketing, habría un impacto positivo en su reputación. Es decir, no sería necesario ser responsable en todas sus actividades, sino solo en una excelente campaña de comunicación.
Hasta este punto ya estarás desesperado por saber cómo este efecto ha perjudicado tu vida amorosa. #ConCalma. La respuesta es la primera impresión que proyectaste. Recuerda el momento en que conociste a esa persona especial, ¿cómo te comportaste? ¿Cómo te veías? ¿por qué tu táctica de seducir mentalmente no funcionó?
Una persona amigable y sonriente genera confianza y puede ser percibida como físicamente atractiva. El efecto halo conlleva a que la persona pueda ser etiquetada como atractiva solo por su sonrisa, inclusive cuando no conozcamos su lado oscuro #DarkSide; por el contrario, una persona callada, seca y/o fría puede ser considerada poco atractiva. Hasta este punto, una posible razón de por qué tu crush no te hizo caso, es la cara de náusea que le pusiste que no sonreíste o no te mostraste lo suficientemente amigable hasta el punto en que le generabas seguridad y compañerismo.
Otra posible implicancia del efecto halo pudo ocurrir por cómo te veías físicamente #SadButTrue. Con esto no me refiero solo a que tan guapo lucías, sino a cómo ibas vestido, qué peinado llevabas o si contabas con algún accesorio que generaba afinidad o disgustaba a ese ser especial. No es coincidencia que las personas suelan sentirse atraídas por individuos con gustos similares. Así, si la persona que te gusta admira algún grupo musical y llevas algún accesorio del mismo, ten por seguro que llamarás su atención. OJO: Solo dije que llamarás su atención, no que caerá rendida a tus pies.
Esta generalización de “cualidades” o “defectos” es una posible respuesta a las decepciones amorosas. Observar a una persona amigable, simpática y/o que nos parece atractiva físicamente, hace que generalicemos sus cualidades y nos parezca perfecta, aunque en realidad sea más defectuosa que juguete chino.
En resumen, una posible respuesta al poco interés de tu crush es que no le causaste una buena primera impresión. Esta puede centrarse no solo en lo físico, sino en el lenguaje no verbal o en los accesorios o ropa que llevabas puestos. Aunque esto parezca reforzar la idea de que vivimos en un mundo materialista y basado en apariencias, podría ser solo parte del instinto que se ha mantenido a pesar de la evolución humana.
Sea cualquiera el caso, mostrar una actitud positiva, presencia impecable y una sonrisa #ComoElJoker, podría aumentar las posibilidades de agradar a los demás. Aunque no sea garantía de que puedas enamorar a tu crush, al menos podrías hacer nuevos amigos.
Editado por: Sofía Flores
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